El Museo Guggenheim de Bilbao acoge, hasta el 21 de septiembre, la retrospectiva «más ambiciosa» celebrada hasta el momento en España de Georges Braque.
La exposición, organizada por el Museo Guggenheim Bilbao y la Réunion des Musées Nationaux – Grand Palais, en colaboración con el Centre national dart et de culture Georges Pompidou, París, se celebra coincidiendo con el 50 aniversario de la muerte del artista.
Braque (1882-1963), es una de las figuras más importante de la vanguardia de principios del siglo XX.
La muestra ofrece un recorrido cronológico que abarca todas las etapas de su trayectoria artística, desde sus inicios en el Fauvismo hasta sus últimas series dedicadas a los talleres, los pájaros y los paisajes de Varengeville.
Se exponen cerca de 250 piezas, entre las que se incluyen algunas de sus grandes obras maestras.
Sus pinturas de naturalezas muertas, sus canéforas, los billares de posguerra, así como los talleres y los pájaros realizados casi al final de su vida, que amplían y resumen sus investigaciones artísticas.
Una sección de esta retrospectiva muestra la faceta de escenógrafo que el artista desarrolló en los años veinte, que podrá apreciarse a través de un montaje único y exclusivo diseñado para el edificio de Frank Gehry.