La provincia de Cuenca es la sexta provincia española en el ratio de atracción de recursos humanos, según el último informe de la Asociación de Empresas de Trabajo Temporal (Asempleo).
El estudio, que recoge los datos del primer trimestre del año, señala que a Cuenca llegan 1,34 trabajadores por cada uno que sale fuera, lo que además de situarla como la sexta provincia en la clasificación nacional en capacidad de atracción de recursos humanos, la sitúa en la primera de la región.
Cuenca es además, junto a Albacete, la única provincia de Castilla-La Mancha con capacidad para atraer talento. La capital albaceteña se encuentra en el puesto 15 a nivel nacional, atrayendo 1,07 trabajadores por cada uno que se marcha.
Los datos, extraídos a partir del Observatorio de las Ocupaciones que publica con periodicidad el Ministerio de Empleo y de la Seguridad Social, dejan a las otras tres provincias de Castilla-La Mancha en situaciones de notable pérdida de su masa laboral.
En ellas, la capacidad para atraer talento no ha sido la suficiente y han sido más los trabajadores que se han marchado fuera que los que han llegado. El caso más preocupante es el de Toledo, que con una ratio de atracción de recursos humanos fijado en el 0,55, se queda como la tercera provincia con peor dato de toda España, sólo por delante de Cádiz y de Cantabria, ambas con una ratio del 0,45.
Guadalajara, donde por cada trabajador que se va llega 0,74, ocupa el puesto número 13 por la parte baja de la tabla, mientras que la provincia de Ciudad Real, con una ratio del 0,90, tampoco ha conseguido atraer el talento suficiente ni absorber la mano de obra necesaria como para mantener el nivel de trabajadores.
En el ámbito nacional, y como no podía ser de otra manera, Madrid es la provincia más atractiva para quienes quieren encontrar un trabajo. Entraron 2,05 trabajadores por cada uno que se fue, y encabeza así un ranking en el que comparte las posiciones de cabeza con Álava, que en segundo ligar, tiene un ratio de atracción de recursos humanos cualificados procedentes de otras provincias de 1,75.
En tercer lugar se sitúa la provincia de Barcelona, donde con una ratio de 1,48, se consolida como uno de los lugares de España mejor vistos a la hora de lograr un empleo.
Además de la ciudad Condal, Asempleo incluye en el bloque de provincias de «alta atracción de recursos humanos» a Islas Baleares (1,39), Soria (1,36), Cuenca (1,35) y de Huesca (1,34).
El grupo de las 15 provincias que consiguen atraer a más trabajadores que perderlos se completa con Málaga (1,22), Castellón (1,19), Vizcaya (1,14), Huelva (1,12), Almería (1,08), Navarra (1,06), Albacete (1,06) y Segovia (1,01).
En el último puesto se encuentra Cádiz, que se evidencia como la que menos capacidad tienen de mantener su capital humano y de atraer al nuevo, con una ratio de atracción interprovincial del 0,45, la misma que la provincia de Cantabria (0,45) y una de las castellano-manchegas, Toledo (0,55).
El grupo de las provincias que más transferencia de recursos humanos hacen a otras zonas de España es mucho más numeroso que las 15 que logran mantener a más capital cualificado del que se va, y se cierra con Guipúzcoa, que presenta una ratio de atracción interprovincial de 0,98.
La provincia de Cuenca, a pesar de tener una buena ratio en lo que a atracción de recursos humanos se refiere, deja de estar tan bien situada si lo que se compara es la proporción de trabajadores que entran y salen de su territorio sobre el total de trabajadores que se mueven a nivel nacional, el decir el flujo de movilidad. Según Asempleo, la provincia ocupa el puesto 33 de la clasificación, con una ratio de entrada del 2% sobre el total de España y de salida del 1,7%.
La conclusión más evidente es que Madrid acapara el 15,98% de las entradas de trabajadores, frente al 7,82% de las salidas contabilizadas en todo el país. Ahí la siguen tres grandes zonas de la península, Barcelona, Sevilla y Valencia. Entre las cuatro son responsables de un tercio (34,18%) de las entradas de trabajadores.