La Policía Científica y los Bomberos han iniciado las investigaciones para determinar el origen de los dos incendios registrados en las últimas horas en la Facultad de Derecho de la Universidad de Granada, una de las de mayor valor patrimonial del país, al situarse en un edificio protegido del siglo XVI y acoger importantes volúmenes.
La mayoría de los ejemplares que contenía la biblioteca se ha salvado, gracias a un traslado a otra estancia para llevar a cabo una rehabilitación de la estancia.
La institución docente trabaja ahora en cuantificar los daños provocados en la sala de lectura donde se produjeron las llamas, que han afectado a los muros del edificio, declarado Bien de Interés Cultural, aunque en un principio se descartan afecciones estructurales, según ha informado el propio arquitecto de la obra que se está ejecutando en la biblioteca.
Con motivo de esta rehabilitación también estaban levantados los techos y las cubiertas de la biblioteca, lo que ha favorecido que el daño haya sido menor. Se prevé que las zapatas puedan conservarse y que no haya problemas estructurales tampoco en la parte superior.
La unidad de Policía Científica del Cuerpo Nacional de Policía ha iniciado una investigación para determinar el origen de los incendios y si han sido intencionados, aunque los primeros datos con los que se trabajan apuntan a que las llamas pudieron originarse a raíz de una chispa producida por los trabajos de rehabilitación.
El primer incendió se registró sobre las 21,30 horas del miércoles, lo que provocó más de una decena de llamadas de ciudadanos alertando del fuego, entre ellos el aparejador de la obra, que ha apuntado que, al parecer, había saltado una chispa producida por la misma obra. Igualmente, ha señalado que no había obreros en el momento del fuego, que no ha provocado heridos.
Sobre las 22,30 horas del miércoles el incendio se dio por extinguido por los bomberos, aunque ya en la madrugada del jueves, sobre las 4,30 horas, se produjo un segundo foco que fue extinguido por los Bomberos, los cuales han mostrado a los medios su sorpresa por la virulencia de las llamas en esta segunda ocasión.
