El consejero de Presidencia y Justicia, Emilio del Río, acompañado por el alcalde de Arnedo, José Antonio Abad, ha informado esta tarde en el Ayuntamiento de la localidad, sobre la declaración como espectáculos taurinos tradicionales el ‘Toro Embolado’ y el ‘Toro Ensogado’ de Arnedo.
El pasado mes de julio el Gobierno riojano aprobó un nuevo Decreto por el que se regulan los espectáculos taurinos populares de La Rioja con la finalidad de establecer el procedimiento para declarar nuevos espectáculos taurinos tradicionales, motivado porque en los últimos años diferentes municipios riojanos tenían interés por recuperar festejos que gozaban de gran popularidad en otra época.
El consejero ha señalado que ‘El toro embolado’ y ‘Toro ensogado’ de Arnedo cumplen perfectamente con el requisito de ser unos espectáculos taurinos arraigados en las costumbres del municipio.
Estos dos espectáculos de Arnedo se unen así a otros como ‘Las sacas de vacas’ en Cervera del Río Alhama, ‘El Toro de San Miguel’ en Rincón de Soto y ‘El toro ensogado’ en Cenicero y en el Barrio de Cabretón de Cervera del Río Alhama.
Los espectáculos taurinos en Arnedo cuentan con una tradicionalidad desde los siglos XVIII y XIX tal como aparece en la documentación de los archivos municipales. A partir de 1903, en el que se construyó la antigua plaza de toros, hay constancia de la celebración de muchos espectáculos en los que intervienen toros en sus distintas vertientes y modalidades.
Desde las fiestas de invierno de San José en 2010 se cuenta en Arnedo con un nuevo recorrido, que cuenta con más y mejores medidas de seguridad, y que es el lugar de celebración de la mayor parte de los actos taurinos.
El consejero ha señalado que en ningún momento el animal sufre daño alguno puesto que la cuerda que sujeta al toro se anuda a la testuz con un nudo corredizo, el manto que se le coloca con la imagen de los Santos de la localidad y el escudo del municipio se sujeta como las sillas de montar de las caballerías, el collar de cascabeles que da sonido a su paso por las calles se sujeta con una hebilla, y por último, las bolas de luz artificial se sujetan a las astas por presión y nunca clavando nada ni perforando los cuernos del animal.
