La Marcha Hoyos de Iregua recupera Santosonorio y Hoyo Mayor

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marcho hoyos ireguaLa Rioja. La Marcha Hoyos de Iregua celebra este domingo se celebrará su vigésima edición y recuperará después de 20 años el paso por el Santosonario y Hoyo Mayor.
La marcha no repetirá el recorrido de su primer año, en 1995, pero sí ha planificado un trayecto con el que se domina paisajísticamente Cebollera, ha dicho el presidente de la Sociedad de Montaña Sherpa, Jesús Escarza.
De dificultad «alta» y con un recorrido de 31 kilómetros, acogerá mil participantes.
El plazo de inscripción anticipada está abierto en la sede de la Fundación Caja Rioja. La cuota de inscripción anticipada hasta el 1 de octubre es de 15 euros.
También podrá realizarse la inscripción el mismo día de la prueba en el frontón de Villoslada de Cameros, entre las 7:00 y las 7:45 horas, con un importe de 18 euros.

RECORRIDO

Desde Villoslada sale en dirección Sur por el sendero de la Virgen, vía que ha servido desde antiguo para acudir en romería a la ermita de Lomos de Orio. El camino remonta el curso del río Iregua entre vegetación de ribera, huertas y prados.
El sendero balizado se bifurca en el Puente de las Rameras. La Marcha opta por seguir a la vera del Iregua, elevándose un tanto sobre el cauce para evitar zonas que suelen inundarse con frecuencia.

En Achichuelo se cruza, junto al puente, la carretera que sube a la ermita de Lomos de Orio. La Marcha sigue por la misma margen y avanza ahora muy cerca del río, cortando algunas zonas encharcadas. Al rato, alcanzamos un puente de madera, por el cual salvamos el Iregua y cambiamos de orilla para llegar a la Blanca.
Llegada a La Blanca en el punto de confluencia de los ríos Iregua y Ra. Entre ambos barrancos, arranca poderoso el cortafuego de la Sartén. Desde aquí, la Marcha toma el curso del río Ra y asciende por una pista bajo hayas y pinos, hasta presentarnos en el arranque del cortafuegos de Calahornos.

De la mano del Cortafuego de Calahornos se asciende hacia la cumbre del Santosonario. En esta dura subida de casi 800 metros de desnivel, el primer tramo es sin duda el más bravo, hasta llegar a un rellano desde el que podemos contemplar, al otro lado del valle y a la misma altura, la ermita de Lomos de Orio, además de un buen elenco de las cumbres de Cebollera. Desde este punto, el cortafuego se suaviza de forma apreciable y llega a una pista.

En la Pista de Hoyos de Iregua, una vez superada la pista, el pino silvestre se hace dueño absoluto del territorio. Más arriba (en la cota 1.800), muere el cortafuegos y el camino busca paso entre pinos más chaparros y retorcidos. Poco después, salimos a terreno abierto para coronar el cerro de Calahornos.
Ya en el Cerro de Calahornos, el panorama que se ofrece es inmenso, con buena parte de los «dosmiles» que conforman la Sierra Cebollera y las Sierras de Urbión y la Demanda, los infinitos pinares de las tierras sorianas, los Cameros y las Viniegras… Un trecho, sin apenas desnivel, nos conduce a la base de Santosonario.

En Santosonario, el Control de Paso nº 2, al abrigo de un roquedo, se halla a 2.000 metros de altitud. La Marcha evita el peñasco (quebrado y complejo) que conforma la cumbre, rodeando el pico por su lado Sur, siguiendo una senda que avanza junto al límite provincial, y después de trazar un giro a la izquierda toma dirección Sureste, pierde altura y se va acercando a la misma cornisa, en la divisoria de aguas.

Ya en la entrada a Hoyo Mayor una senda abierta en los cortados que se precipitan hacia el Hoyo Mayor, desciende por un suelo descompuesto hasta alcanzar el fondo de la cubeta glaciar. Estos Hoyos fueron labrados por la presión de los hielos a lo largo de un proceso largo de la historia. Siguiendo el descenso, llegamos a la pista de Hoyos.

En la Pista de Hoyos de Iregua se corta la pista y se continua ladera abajo por una senda que discurre elevada sobre el cauce del arroyo Ra. A medida que bajamos, el bosque ralo de pinos y acebos se va tornando más prieto y la presencia de las hayas apoderándose del espacio. La senda se acerca al agua hasta llegar a un vado.
En Vado Arroyo se toma una trocha que desciende junto al río Ra. Al llegar poco después al hermoso rincón que conforman las cascadas del río Ra, la trocha toma porte de pista y así continúa en descenso por el barranco hasta llegar a Puente Ra.

En Puente Ra, sin pasar el puente, hacia la derecha sale un sendero balizado que nos remite a la ermita de Lomos de Orio. El camino remonta junto a un barranquillo secundario, bajo pinos y hayas, para alcanzar la ermita.
En la Ermita de Lomos de Orio, desde la fuente chilena, un camino sale bordeando la ermita y acomete un repecho fuerte para luego atenuarse y avanzar suavemente por el pinar. Así llegamos a una baliza de senderos.

En la Baliza sendero de Pajares, la Marcha inicia un descenso prolongado, pasa poco después junto a la fuente de la Romanizosa y llega a la pista del Sillar.
En la Pista del Sillar se continúa monte abajo por este contrafuerte, a caballo entre el barranco de las Rameras y el del Iregua. El pinar va dejando paso a un bosque mixto y más adelante termina aclarándose entre viejos pastizales inundados de matorral. Llegamos a la pista de las Rameras y de inmediato al puente de las Rameras.
Ya en el Puente de las Rameras no queda sino desandar el camino recorrido por la mañana. Ahora, siguiendo en descenso el curso del río Iregua para llegar a Villoslada y dar por terminada esta edición 2014 de la Marcha Hoyos de Iregua.