El festival de arte contemporáneo italiano ‘Artour-o il Must’, que se realiza desde hace una década en Florencia, ha escogido Mérida para «exportar» la experiencia este año por su «riqueza» histórico-cultural del 23 al 26 de octubre.
Uno de los principales objetivos de dicho festival, que cada año elige una ciudad para su celebración es el «impulso» al lugar que se elige «como espejo de la cuna italiana del arte». «Mérida, su patrimonio y territorio, tendrá la oportunidad de presentar su aportación a la atmósfera artística contemporánea», ha destacado la organización de Artour-o.
En la capital extremeña se han escogido espacios «representativos para el arte moderno» como el Hotel Adealba o la Biblioteca Juan Pablo Forner, así como el Museo Ciudad de Mérida, el Costurero.
«Los ciudadanos podrán pasear por la capital y descubrir una exposición urbana de arte con piezas traídas desde Italia hasta Extremadura, y que juntas forman una ruta artística única». Asimismo, los artistas extremeños tendrán una «oportunidad» de abrirse al mercado internacional.
El certamen deja asimismo un hueco para los creadores «oriundos» de la ciudad, como Cintero, el escultor creador de los escudos de la Asamblea y que presentará su «nueva colección», o el ceramista Lorenzo Pérez Vinagre. Y otros como Juan Zúñiga, con diseño marcado por las líneas «más» clásicas y Miguel Sansón, conocido por sus magníficas y «envolventes» sillas.
Como representación italiana, viajará a Mérida la artista romana especializada en las instalaciones escultóricas Valeria Catania y también Ignazio Fressu, de Florencia, así como Millot Mirashi desde Rumanía.
Artour-o intenta unir la expresión artística italiana con la española, con una misión común, «difundir el valor de la creatividad que nace en ambos países», ha añadido.
En ediciones anteriores, el festival ha visitado ciudades como Roma, Florencia, Bolonia, Génova, Yiwu, Sanghai, Mónaco o Londres. Por último, ha anunciado que este año se incluirá una sección ‘El David de Miguel Ángel’ dedicada al artista italiano, al cumplirse 450 años de su muerte, con piezas expuestas en la Academia de Bellas Artes de Florencia, «la más antigua del mundo»