Barcelona es la primera ciudad europea que pone en marcha el proyecto ZeEUS(Zero Emission Urban Bus System), un plan de la Unión Europea para promover los autobuses eléctricos urbanos. Lo hace con la incorporación de cuatro vehículos 100% eléctricos de fabricación europea, con una autonomía de entre 200 y 250 kilómetros, que servirán para contrastar la funcionalidad, el confort y los consumos de energía de estos autobuses.
El primero de ellos circula por la ciudad desde el pasado 18 de agosto y ha sido asignado a la línea 20 (Estació Marítima – Plaça del Congré Eucarístic), aunque posteriormente pasará a integrarse en otras líneas, con la intención de alternar recorridos de características diversas. Una segunda unidad, idéntica a la primera, se acaba de incorporar a la flota de TMB y en pocos días comenzará también el servicio comercial. A estos dos autobuses, fabricados por la empresa vasca Irizar, se sumarán dos más, de la empresa polaca Solaris, que aún están en proceso de fabricación.
Pioneros en la apuesta por el vehículo eléctrico
Con el apoyo de la Unión Europea y la colaboración de la UITP, esta iniciativa sitúa Barcelona al frente de la investigación en el transporte urbano de emisión cero. Más adelante, se sumarán el resto de ciudades seleccionadas: Londres y Glasgow, en Gran Bretaña; Estocolmo (Suecia), Münster y Bonn, en Alemania; Pilsen (República Checa) y Cagliari (Italia). En este sentido, el alcalde Xavier Trias ha expresado “la apuesta clara del Ayuntamiento por el cambio tecnológico y por el vehículo eléctrico, que es la revolución del siglo XXI”. “Queremos el vehículo eléctrico como una de las señas de identidad de la ciudad y que, en un futuro no muy lejano, las emisiones de la flota de autobuses estén a cero”, afirmó el alcalde.
TMB es actualmente un operador de bus de referencia en términos ambientales, ya que dispone de una de las flotas más limpias y avanzadas : 411 coches de gas natural comprimido, más de 130 de híbridos y un sistema de filtros de alto rendimiento que ha rebajado de manera drástica las emisiones del resto de coches diesel. En conjunto, transporta anualmente 180 millones de pasajeros en Barcelona y 10 municipios de su área metropolitana.
