Su padre Bebeo Valdés fue un gran colaborador del certamen, ahora Chucho hereda este gusto por el Voll-Damm Festival Internacional de Jazz de Barcelona, y se convierte de manera estable en su padrino.
En rueda de prensa este martes, el cofundador de la promotora The Project, Tito Ramoneda, ha explicado que la idea de convertir al músico afro cubano en padrino, parte del concierto que acogió el festival el pasado año dedicado a Bebo Valdés tras su muerte, ‘Rumba para Bebo’: «Cerramos un ciclo y abrimos una puerta al futuro».
Chucho Valdés tendrá de esta manera, una presencia permanente en el festival, con la presentación cada año de proyectos únicos y nuevos, especialmente pensados para el certamen: «Es como una historia de amor que comenzó con mi padre desde ‘Tropicana'», ha expresado Valdés. «Me siento como una continuación de Bebo Valdés».
La primera de estas colaboraciones será el concierto de Chucho Valdés y The Afro-Cuban Messengers dedicado a los 40 años de la banda Irakere cofundada por Chucho en 1973 y que revolucionó la historia de la música.
El concierto, en L’Auditori, promete ser «un tributo a aquella banda pero con otro sonido», ha avanzado Valdés, y ha remarcado que simplemente es una música diferente, ni mejor ni peor, protagonizada por una orquesta joven, y que contará con un invitado especial: el fenómeno cubano Alexander Abreu.
El repertorio ha sido difícil de seleccionar, dada la prolífica carrera de esta banda, además de su dicotomía en dos etapas diferenciadas, pero seguro que contará con temas como ‘Juana 1600’, ‘Bacalao con pan’ y ‘Guayo de Catalina’, ha avanzado.