El Ayuntamiento de Pamplona ha trabajado para conseguir una ciudad más eficiente tratando de consumir menos recursos y ayudando a los ciudadanos a que consuman menos. Pamplona ha expuesto su experiencia en esta manera en el Congreso Mundial de Edificación Sostenible que celebra en Barcelona entre el 28 y el 30 de octubre. El responsable de la Agencia Energética Municipal, Alejandro Astibia, ha participado en una mesa redonda en la que ha detallado las acciones acometidas por el Ayuntamiento en pro de una mayor eficiencia energética.
El Congreso World Sustainable Building 2014 es el mayor encuentro a nivel mundial sobre edificación sostenible donde se reúnen las instituciones internacionales más importantes e influyentes en la materia. Está organizado por Green Building Council España (GBCe) y tiene como objetivo promover la adopción de una respuesta adecuada a los desafíos sociales y ambientales globales a los que se enfrenta el sector de la edificación sostenible mediante el consenso de las entidades, los principales agentes del sector y de expertos mundiales.
Entre otras cuestiones, se busca satisfacer la demanda de vivienda de la población mundial considerando su evolución futura en el tiempo y el espacio, reducir la huella ecológica necesaria para hacerlo teniendo en cuenta especialmente sus efectos climáticos y promover un modelo de actividad económica solvente, sostenible y generadora de empleo de calidad.
Pamplona como ejemplo
La apuesta municipal por la sostenibilidad se ha traducido, por un lado, en medidas tendentes al menor consumo energético en el Ayuntamiento y, por consiguiente, a un mayor ahorro económico y, por otro lado, a la sensibilización y concienciación a la ciudadanía sobre la eficiencia energética. El cambio en 2008 de todas las lámparas de los semáforos por tecnología LED produjo en ahorro del 88% en la factura de la electricidad asociada a esas instalaciones. La colocación de reductores de flujo luminoso y estabilizadores en el alumbrado en 2009 y 2011 permitió regular la intensidad de las luminarias en función de la necesidad. El Ayuntamiento de Pamplona fue pionero en la adjudicación de un contrato de mantenimiento de edificios municipales en el que, además del propio mantenimiento, se incluía la gestión energética de los inmuebles y el suministro de energía. Gracias a ello se consiguió en 2013 un ahorro energético de más del 15%, lo que supone casi 540.000 euros.
En los edificios de nueva construcción, hace 10 años se tomó la decisión de que todos los nuevos inmuebles emplearan energías renovables y medidas de eficiencia energética. Esa sostenibilidad no está reñida con la calidad arquitectónica, ya que un edificio como la Escuela Infantil de la Milagrosa ha logrado el Premio de Arquitectura Española en 2013, apostando por las energías limpias. También se ha financiado con diferentes partidas presupuestarias la rehabilitación de viviendas y edificios, primando la eficiencie energética.
En los últimos años, el Ayuntamiento ha apostado también por la movilidad sostenible, por hacer una ciudad cada vez más accesible y más respetuosa con el medio ambiente. Con la inauguración en el último año de varios nuevos parques (Aranzadi, Trinitarios, Alfredo Landa y parque del lago de Arrosadía) o la consolidacion del parque fluvial, Pamplona suma 4.795.600 metros cuadrados de zona verde, lo que supone que haya por encima de 25 m2 por habitante. Además, la construcción de los ocho ascensores urbanos y las rampas mecánicas que unen Iturrama y Azpilagaña han supuesto el ahorro de 140 toneladas de emisiones de CO2, ya que con esas infraestructuras se facilita que los ciudadanos se desplacen sin necesidad de utilizar el vehículo privado.
