El motivo ha sido eludir los controles de seguridad para introducir cocaína en España. Se trata de dos operarios, encargados de asistir a personas discapacitadas y con movilidad reducida, que recibían la droga oculta en equipajes de cabina de manos de pasajeros. La organización de narcotraficantes a la que iba a parar el estupefaciente ha sido asimismo desarticulada, con 21 personas arrestadas, y los agentes se han incautado de 165 kilos de cocaína.
Agentes de la Policía Nacional han desarticulado una organización criminal dedicada al tráfico de drogas que empleaba el aeropuerto de Adolfo Suárez-Madrid Barajas para introducir cocaína en territorio español. Dos trabajadores del aeropuerto, que han sido arrestados junto a otros 21 miembros de la red, resultaban claves en este proceso, al recibir la droga oculta en equipajes de cabina de manos de pasajeros y eludir los controles de seguridad establecidos. Durante el desarrollo de la investigación, iniciada en junio de 2013, los agentes se han incautado de un total de más de 165 kilos de cocaína.
Pagaban entre 3.000 y 5.000 euros por viaje
Esta red delictiva utilizaba el método denominado “de mano” para lograr introducir cantidades entre los siete y los trece kilogramos de cocaína de una forma continuada. Para ello usaban a “correos”, personas encargadas, por entre 3.000 y 5.000 euros, de transportar un equipaje de cabina con estupefaciente que se les entregaba en el interior del aeropuerto de origen, principalmente en Bolivia. Una vez aterrizaban en Madrid entregaban discretamente la maleta con la droga a los empleados del aeropuerto contratados por la propia organización, que la recogían en la pista de aterrizaje. Éstos aprovechaban su condición de trabajadores para evitar los filtros de seguridad y abandonar el aeropuerto con la droga.
Discreto pase de 10 kilos de cocaína
Los investigadores han sorprendido a los trabajadores del aeropuerto investigados durante uno de los pases de droga. Los dos detenidos, ya con el uniforme de trabajo, accedieron a la terminal 1 y mientras uno permanecía en la denominada zona de tránsito el otro se dirigió a la pista de aterrizaje. Ya en ella, los agentes observaron cómo un pasajero, que minutos antes había descendido de un avión y se dirigía hacia los controles de seguridad, entregaba una mochila a uno de los trabajadores investigados. Los agentes han interceptado y detenido a los dos trabajadores como presuntos responsables de un delito contra la salud pública. En el interior de la mochila, ocultos en un doble fondo, había 10 kilos de lo que al contacto con el narco test resultó ser cocaína.
Asimismo, en el marco de la operación, los agentes han detenido a un total de nueve miembros de la red. Estas personas se encargaban de enviar la droga, contratar a los correos y esperar a la salida del aeropuerto para recoger la sustancia estupefaciente. Durante las investigaciones, iniciadas en junio de 2013, los agentes se han incautado de un total de más de 165 kilos de cocaína y han asimismo arrestado a 12 “mulas” o personas encargadas de transportar la droga en equipajes de mano.
La operación ha sido llevada a cabo por agentes de la Brigada Provincial de Policía Judicial y del Puesto Fronterizo Madrid-Barajas, pertenecientes todos a la Jefatura Superior de Policía de Madrid.
