La Conselleria de Agricultura ha recibido una decena de avisos de capturas de una especie de pez globo venenosa no apta para el consumo.
Ante esta situación ha editado un póster informativo en el que se especifica qué hacer si se encuentra un ejemplar para evitar que entre en la cadena de comercialización y se consuman por desconocimiento, aunque su venta está prohibida.
Se ha hallado un ejemplar en Blanes (Girona), otro en Montgat (Barcelona), dos en Vilanova i la Geltrú (Barcelona), dos en Cambrils (Tarragona), uno en L’Hospitalet de l’Infant (Tarragona), dos en la Ametlla de Mar y otro en Coma-ruga (Tarragona).
La primera vez que se constató la presencia de esta especie fue en 2009 en Sant Carles de la Ràpita (Tarragona) y, hasta 2013, el departamento ha recibido notificaciones de otros cinco ejemplares –uno en 2011, tres en 2012 y uno en 2013–.
El pez globo pertenece a la familia ‘Tetraodontidae’, una especie pelágica que se encuentra entre aguas y vive normalmente entre los 10 y los 100 metros de profunidad, aunque se la puede encontrar a 500 metros.
Tiene un color azul-gris con el dorso entre marrón y verde y su vientre es blanco y está recubierto por pequeñas espinas; puede hincharse cuando se siente en peligro, de forma que su apariencia es la de un pez globo ahuecado por la parte inferior y sin escamas.
Esta especie ha entrado en el Mediterráneo oriental por el canal de Suez, y se ha establecido y propagado hasta llegar a afectar a poblaciones autóctonas de otras especias y a la pesca, según el Instituto Español de Oceonografía.
Es venenosa porque contiene tetrodotoxina, una toxina que paraliza el sistema nervioso, por lo que es peligrosa si se consume.
