El alcalde de Huelva inaugura la VI edición del Taller de la Memoria del Cristina Pinedo

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PRUEBA

El alcalde de Huelva, Pedro Rodríguez, acompañado de la teniente de alcalde de Familia, Servicios Sociales y Juventud del Ayuntamiento de Huelva, Pilar Miranda, ha inaugurado esta mañana la sexta edición del Taller de Entrenamiento de la Memoria incluido en los programas de intervención comunitaria de la zona del Polígono San Sebastián, que se desarrollan desde el Centro Social Cristina Pinedo. 

Participan un total de 83 mayores, divididos en dos grupos, para atender a los que repiten la experiencia por un lado y a los que se inician en ella por otro. Se trata de un taller que se imparte a razón de una sesión, de unos 75 minutos, a la semana, todos los miércoles, durante más de cuatro meses, realizando entre 15 y 20 sesiones cada grupo, para lograr una atención personalizada. 

Tal y como ha explicado el alcalde, los objetivos generales del proyecto son “fomentar la autonomía de los mayores, aprovechando la utilización de sus recursos cognitivos; aumentar su calidad de vida; facilitar un espacio estimulante y enriquecedor donde entrenar la memoria”. Además, se trabaja para mejorar el rendimiento de la memoria, detectar posibles deterioros cognitivos, reducir la ansiedad que provocan los fallos de memoria, aumentar su autoestima, proporcionar seguridad y estimular la propia identidad y al mismo tiempo, favorecer la comunicación entre los participantes, evitar la desconexión del entorno y favorecer las relaciones sociales. 

Se retoma así una actividad por la que ya han pasado desde su puesta en marcha en 2011, más de 200 mayores, reeditándose de manera continua, a razón de dos talleres al año para dar cobertura, por un lado, a quienes precisan de un refuerzo en el llamado ‘Grupo de Continuidad’, así como para atender a nuevos interesados en este taller que está teniendo un enorme éxito entre personas que quieren conocer el funcionamiento básico de su memoria y están dispuestos a aprender un conjunto de técnicas para mejorarla. 

De esta forma, la iniciativa municipal se ha convertido en una de las principales demandas de los mayores onubenses en los Centros Sociales, a la que el Ayuntamiento de Huelva responde con actuaciones similares en La Orden, bajo la denominación de Proyecto Mnemo y en el Lazareto, con el taller de nueva creación, que se estrenó hace unos días bajo el título de ‘Huella’. 

Se trata de proyectos muy innovadores, en los que el Ayuntamiento de Huelva fue pionero, arrancando en el año 2007, cuando no era habitual trabajar con mayores en materia de prevención. 

El Ayuntamiento de Huelva se estrenó con este tipo de talleres con el proyecto Mnemo de La Orden en 2007, que nació para promover la relación social, estimular a los mayores a nivel cognitivo, con talleres y actividades de autonomía personal, entrenamiento mental y salud. En principio, incluía contenidos y conceptos relativos a psicomotricidad, hábitos saludables, gimnasia y psicoestimulación preventiva, aunque poco a poco fue centrándose en actividades de entrenamiento mental, ejercicios de aptitudes psicológicas, resistencia, actividades de orientación, atención, memoria, lenguaje y razonamiento para estimular a los mayores. 

De esta forma y mientras el Ayuntamiento de Huelva reforzaba, tanto desde la Concejalía de Servicios Sociales, como desde la de Mayores, los talleres de Salud y Autocuidados, las Escuelas Saludables o el programa Acuagym destinados a la prevención del estado físico de los mayores, se pusieron en marcha proyectos específicos para estimular la memoria, como el Taller del Cristina Pinedo o el recién estrenado este año en el Lazareto. Además, desde la Concejalía de Mayores, se organiza anualmente un programa formativo denominado ‘Barómetro de la memoria’ que se imparte en Asociaciones de Mayores de toda la ciudad. 

Con estas iniciativas, el Ayuntamiento de Huelva trabaja para reducir la ansiedad que les provoca a los mayores los primeros olvidos, para minimizar la preocupación ante pequeños fallos o descuidos que les hacen pensar en riesgos y demencias. Además, la asistencia a estos talleres genera un espacio de relación y convivencia que combate el aislamiento con beneficios cognitivos, emocionales y sociales.