En dos años, el servicio municipal de recogida a domicilio del Ayuntamiento de Barcelona ha sumado un total de 516 toneladas de ropa de las 13.000 solicitudes que ha atendido. Es un servicio gratuito de “puerta a puerta” que el consistorio puso en marcha en 2012, en colaboración con la Fundación Formación y Trabajo. Con la iniciativa se han creado puestos de trabajo para personas en riesgo de exclusión social.
Para poder hacer uso del servicio de recogida de ropa se debe pedir hora los teléfonos de atención ciudadana (010 y 900.226.226) y en breve los miembro de la Fundación Formación y Trabajo vendrán a recogerla. El único requisito es depositar un mínimo de dos bolsas de ropa. El “puerta a puerta” es una de las tres vías que se ofrece para dar la ropa que no se usa, además de los contenedores naranjas de Ropa Amiga y los 39 puntos verdes de la ciudad. Desde 2012, se ha recaudado unas 4.000 toneladas de ropa de segunda mano en estas tres formas de recogida.
Este servicio ha creado hasta 10 puestos de trabajo directo en la Fundación Formación y Trabajo para personas en riesgo de exclusión social. Al mismo tiempo, el servicio ofrece ropa a las personas que más lo necesitan y los beneficiarios del programa municipal Entrega Social.
Reciclaje, entrega social y tiendas de segunda mano
Una de las principales diferencias con las otras vías de recogida es que la ropa que se entrega en mano es de mejor calidad . Esta se aprovecha más para la venta en la red de tiendas de Ropa Amiga y para los usuarios de los servicios sociales municipales. En cuanto el circuito de recogida, la ropa obtenida del “puerta a puerta” se envía a la planta de reciclaje, donde se hace la elección según su estado y destino. La mayoría de ésta, un 60 por ciento, se envía a mercados de África y una cuarta parte en Asia para el reciclaje.
