El Mercado de Santo Domingo de Pamplona se adelanta al futuro conservando todo lo que ha hecho de este lugar el preferido durante siglos para los pamploneses en cuestión de compras.
Hay lugares que no pasan inadvertidos para quien los visita. El Mercado de Santo Domingo de Pamplona es uno de esos lugares. Punto fundamental de encuentro entre el pasado y el presente no quiere perder el trazo del futuro. Los diferentes puestos que los componen junto con el nuevo espacio de ocio que, en pocos días, abrirá sus puertas, le confieren a este Mercado un punto de visita y compra imprescindible para pamploneses y foráneos
Nos lo cuenta Susana Formmknecht, gerente del Mercado de Santo Domingo de Pamplona, “el Mercado es un punto de encuentro. Además de comprar se pueden hace otras actividades como se vio el pasado sábado, y en un punto en donde la venta es cercana, es fresca y es económica y, a partir de ahora, se puede realizar on line, llevando la compra a cualquier punto de Pamplona y comarca”.
La puesta en marcha del servicio decompra on line, poder hacer la comprar desde casa o la próxima inauguración del Café Teatro, son unos de los “últimos cambios radicales” que en materia de actuaciones está realizando el Mercado de Santo Domingo. Un espacio social, de encuentro, de interrelaciones que trastea por la historia desde hace ya muchos siglos.
Un lugar a cuidar y mimar como en1.565 cuando el Ayuntamiento adquiere unos terrenos detrás de la Judería para instalar las “carnicerías”….. para que estén todas juntas…. Se llamó a este lugar la “Plaza de Abajo” para diferenciarla de la “Plaza de Arriba”, la actual Plaza Consistorial, donde siguió celebrándose el mercado de frutas y verduras.
“Ya en el 4 de julio de 1565, el Regimiento acordó: “se tome la huerta de Antón Caparroso y sus herederos, toda o lo que fuese necesario para hacer plaza y en ella las carnicerías, porque estén todas juntas y los tendidos para los corderos”. Así es como comenzó el mercado general de la Ciudad, en el que a excepción de la fruta que se vendía en la Plaza de Arriba (Plaza Consistorial), se podían comprar toda clase de alimentos.”
Las frutas llegaron en 1866, casi un siglo después (1769) de la construcción en la Plaza de Abajo de un nuevo edificio de grandes dimensiones, El Pósito. En la planta baja, en torno a un amplio patio con soportales, se instala el mercado. Las carnicerías y pescaderías ocupaban tres alas quedando reservada la cuarta para los puestos de verdura y otros comestibles. Lo que hoy es la esencia del Mercado de Santo Domingo de Pamplona.
Un lugar emblemático, histórico y muy personal que infiere a Pamplona uno de sus rasgos característicos como es la relación de sus gentes con los buenos manjares que da la naturaleza.
El servicio de compra on line, la próxima apertura del Café Teatro o la renovación en muchos de los 31 puestos que existen en su interior colocan al Mercado de Santo Domingo de Pamplona sin ningún género de dudas en la competición por el presente y, sobretodo con el futuro. Siempre lo ha hecho y ha salido victorioso.