El presidente del Cabildo de Gran Canaria, José Miguel Bravo de Laguna, presentó el martes el Proyecto de Rehabilitación Paisajística y Arquitectónica del Parque Tony Gallardo, un espacio ubicado dentro de la Reserva Natural Especial de las Dunas de Maspalomas y que según sus palabras, se transformará en un oasis para aves y especies vegetales endémicas, convirtiendo el recinto en un nuevo atractivo turístico del sur de la isla tras su restauración y revitalización.
El proyecto está presupuestado en 1,8 millones de euros y se trata de una obra simbólica en un oasis único en Europa que hay que cuidar en correspondencia con la intención del Cabildo de promocionar el Oasis de Maspalomas como Bien de Interés Cultural, según manifestó Bravo de Laguna.
«Tenemos la obligación de proteger el espacio sobre el que vamos a actuar manteniendo el espíritu del escultor que le ha dado nombre. Tony Gallardo nos hablaba de conjugar Arte y Naturaleza, y eso es lo que vamos a hacer, con el añadido de ciertas medidas de rehabilitación para modernizar ese espacio y hacerlo sostenible desde el punto de vista medioambiental».
Para que el parque tenga un mantenimiento y que no vuelva a deteriorarse, el Jardín Botánico Viera y Clavijo se encargará, en coordinación con el Cabildo, de mantenerlo.
Se pondrá en marcha de forma paralela el Aula de Formación Tony Gallardo que integrará los ámbitos artístico, cultura, turístico, arquitectónico y medioambiental. Y se convocará un certamen anual de escultura para artistas de la isla que quieran promocionar su arte.
Las actuaciones se engloban en dos áreas dentro del mismo recinto, enlazadas por una red de caminos para el tránsito de los ciudadanos grancanarios y de los turistas que visiten la zona.
Se creará un jardín de interés botánico que recreará la secuencia entre el bosque termófilo del fondo del barranco y la vegetación propia del litoral. Por otra parte, se enriquecerá y preservará el corazón del parque como área de refugio para aves.
El futuro parque se comportará como un ecosistema vivo, equilibrado y adaptado a nuevas actividades. Ofrecerá al visitante más posibilidades de tránsito en el interior del parque, un mayor disfrute del pequeño oasis, lo que se complementará con lecturas didácticas en el transcurso de los diferentes itinerarios.
Se persigue del mismo modo aumentar la interacción del visitante con el recinto con la apertura de nuevos accesos, la incorporación de mobiliario, nuevos recorridos y espacios de estancia. Estos nuevos espacios permitirán descansar y disfrutar del paisaje y de las esculturas del parque.
El mobiliario permitirá sentarse en diferentes posturas, tumbarse e, incluso, jugar en él. Se dispondrá de una serie de esculturas que entren en interacción con el espacio, con los visitantes y con la obra de Tony Gallardo. Incluso los viandantes que no entren en el recinto podrán apreciar su interior gracias al vallado que se instalará.