Una avería eléctrica provocó un apagón en la cárcel de Alhaurín de la Torre desde la madrugada del domingo hasta la tarde de ese mismo día.
El incidente ocurrió en torno a las 2:00 y se vio agravado hacia las 4:00, cuando los generadores alternativos dejaron de funcionar, lo que mantuvo a oscuras el centro penitenciario. Sólo uno de ellos, el que suministraba electricidad en la zona de cámaras y seguridad, seguía operativo.
El fallo provocó la suspensión de las comunicaciones por cristal de los internos con los familiares. No se produjeron agresiones ni tampoco fugas, pese a que el riesgo era elevado. «La avería menoscababa la seguridad del centro. Demasiado bien se portaron los internos. Estábamos en sus manos», expresó un funcionario. El temor era que la avería persistiera cuando ya no hubiera luz solar.
Durante la jornada, se vieron también afectadas prácticas cotidianas como el reparto de las comidas, que, según el representante de Acaip, Francisco Mancero, se sirvieron frías. «Hay que cocinar para 1.500 personas y se hace con muchísima anticipación. Para el desayuno, precisó este mismo trabajador, se sirvieron batidos de chocolate con galletas. Al mediodía se optó por sardinas en lata y macarrones.
