El bosque tiene 3,5 hectáreas de superficie y está ubicado en el parque de Valdebebas, del que la alcaldesa de Madrid ha anunciado su apertura inminente
Los ciudadanos que lo soliciten pueden participar de forma directa en la conservación y mejora del patrimonio verde de la ciudad plantando un árbol en este nuevo espacio
Los madrileños tienen desde el pasado 2 de de enero la posibilidad de convertirse en jardineros por un día. El Bosque de los Ciudadanos, ubicado en el parque de Valdebebas, del que la alcaldesa ha anunciado su apertura inminente, es una zona verde en cuya creación van a participar quienes lo soliciten a través de la plantación de un árbol. Este nuevo espacio cuenta en su primera fase con 3,5 hectáreas de superficie para generar un bosque de 3.500 ejemplares de especies autóctonas, como encinas, pinos, olivos y almendros. La alcaldesa de Madrid, Ana Botella, se ha sumado hoy a las plantaciones en las que ya han colaborado 306 personas a titulo individual y a través de asociaciones o colegios. Otras 1.341 reservas se han formalizado para plantar un árbol hasta el mes de marzo.
El Bosque de los Ciudadanos es y será, en palabras de la alcaldesa, «un espacio abierto donde se aprenda y disfrute realizando una labor tan importante para el medio ambiente como plantar un árbol». Además, los participantes en esta inactiva tienen la oportunidad de conocer el valor de la especie, sus características, la manera de plantación y su posterior conservación.
Futuro parque Felipe VI
El bosque visitado hoy por Ana Botella está enclavado en el Parque de Valdebebas, que en el futuro llevará el nombre de Felipe VI. Una zona verde de 470 hectáreas de superficie que se convertirá en el parque urbano construido más grande de Madrid y en el pulmón del noroeste de la ciudad.
En él están representados cinco ecosistemas forestales del interior peninsular: La Mancha, la Alcarria, Sistema Central, Sistema Ibérico y Montes de Toledo. Como ha subrayado la alcaldesa, el parque está creado con criterios de sostenibilidad, «ya que alberga especies adaptadas al suelo y la climatología de Madrid». Además, cuenta con praderas naturales para minimizar el consumo de agua.
El embalse que se ha construido recoge, a través de un entramado de canaletas superficiales y drenes subterráneos, las aguas pluviales y las reutiliza para llenar los cauces ornamentales y las laminas de agua existentes en el parque. La alcaldesa ha explicado que este sistema, junto con el humedal natural restaurado, «está atrayendo a multitud de especies de fauna, como rapaces, pájaros, ánades, perdices, liebres, reptiles o anfibios»
