El grupo critica que se utilicen los organismos públicos para «atacar a las personas que tienen ideas diferentes a las suyas».
El Ayuntamiento de Madrid ha prohibido el concierto que tenía previsto ofrecer el próximo sábado el grupo Soziedad Alkoholika en el Palacio de Vistalegre de Madrid. La prohibición está motivada en un informe en contra de la celebración del evento efectuado por la Policía Municipal el jueves pasado, con base en el artículo 5 de la Ley de Espectáculos que establece la prohibición de la celebración de actos que «inciten o fomenten a la violencia…». La prohibición fue notificada por el ayuntamiento al promotor ese mismo día.
La resolución del Área de Gobierno de Seguridad y Emergencias del Ayuntamiento de Madrid ordena la prohibición de la celebración del concierto «por apreciarse que el desarrollo del mismo se prevé pueda producir alteraciones del orden público con peligro para las personas y bienes».
La reacción del grupo y de sus seguidores no se ha hecho esperar. Tras conocerse la prohibición este lunes, el grupo vasco, a través de su página web, calificó de «ridículos» los argumentos que los «censores» han utilizado para cancelar esa actuación. Han tachado de «patético» el informe elaborado por la Policía Municipal de Madrid y han recordado que hace 13 años se pronunciaron «claramente contra cualquier tipo de violencia para resolver ningún conflicto».
«Al Gobierno de Madrid no les gusta lo que decimos y cómo lo decimos, lo cual para ellos es una razón de peso para prohibir un concierto y coartar el derecho a la libertad de expresión,», ha afirmado este grupo, que asegura que en 25 años de carrera nunca ha habido altercados en sus conciertos.
El grupo ha suspendido de forma definitiva el concierto que tenía previsto dar este sábado al no encontrar un espacio adecuado después de la prohibición impuesta por el Ayuntamiento de Madrid para impedir que se celebrará en el Palacio de Vistalegre.
La delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes, también se había pronunciado este lunes en contra de la celebración del concierto al solicitar a la fiscalía que estudiase la posibilidad de suspender el citado concierto, porque podría suponer un delito de enaltecimiento del terrorismo.
El Tribunal Supremo confirmó en el 2007 la absolución del grupo Soziedad Alkoholika de un delito de enaltecimiento del terrorismo al estimar que sus canciones, «por más repulsa social» que merezcan, tienen cabida «en el legítimo ejercicio de la libertad de expresión» y son «tolerables».
El grupo atribuye la suspensión a «sectores de la extrema derecha temerosos de la diversidad cultura y la libertad ideológica que estaban presionando para provocar la cancelación de nuestro concierto». Y añaden, «han pasado 13 años desde que nos acusaron y comenzaron a perseguirnos sin cuartel. El mismo tiempo desde que nos pronunciamos claramente contra cualquier tipo de violencia para resolver ningún conflicto. Han pasado ya nueve años desde que fuimos juzgados y absueltos de supuestos delitos», concluye el grupo que se ha visto obligado a cancelar al menos en seis ocasiones sus conciertos en la capital en los últimos cinco años.
