Técnicos de la Dirección General de Carreteras de la Comunidad de Madrid visitaron el pasado 27 de febrero el nuevo camino peatonal que une el casco urbano con la Dehesa Boyal para comprobar que, una vez finalizada la instalación del vallado de madera, se puede proceder en los próximos días a instalar la barrera metálica de seguridad que lo separa de la M-523, dando con ello por finalizada la obra.
Los técnicos han estado acompañados en su visita por el alcalde, el concejal de Obras y Servicios y personal del área.
El nuevo camino fue ya estrenado por un grupo de unos 100 vecinos que, el pasado domingo, 22, fueron convocados por el Ayuntamiento para recorrer a pie esta senda de unos dos kilómetros aproximados que separan el casco urbano del espacio natural de la Dehesa Boyal, disfrutando de un refrigerio en el área recreativa de la Dehesa, al finalizar el recorrido. Se trata de una obra realizada y financiada por la Dirección General de Carreteras de la Comunidad de Madrid, a propuesta del Ayuntamiento con una inversión de 55.600 euros, incluyendo el coste de la barrera metálica.
