El Cibernàrium, el centro de capacitación tecnológica de Barcelona Activa, está de celebración. Desde que se inició en el año 2011, por la segunda planta del edificio Barcelona Growth Centre, donde se ofrece este servicio, ya han pasado 100.000 participantes. Son emprendedores, empresarios, personas en búsqueda de empleo o trabajadores en activo que quieren mejorar su perfil profesional y que valoran muy positivamente la formación que reciben, ya que la han puntuado con 8 puntos sobre 10. El 73% de estos usuarios aplican todo lo que aprenden en estos cursos a su entorno profesional.
La oferta formativa del Cibernàrium se estructura en dos bloques: por área temática, como la tecnología aplicada al marketing, la imagen digital o el diseño web, y por sector de actividad, como el turismo, la educación, el comercio o la salud. En total, son más de 150 actividades diferentes de corta duración, de entre 3 y 12 horas, que se renuevan cada trimestre según las tendencias y la demanda del mercado.
Los cursos se complementan, además, con contenidos disponibles en la web en otros formatos, como vídeos o manuales digitales. Precisamente, el Cibernàrium quiere apostar en esta dirección, y también reinventar el modelo e impulsar la formación abierta y más accesible. Para hacerlo posible, durante este año se llevará a cabo el proyecto de conversión de las actividades actuales en cursos del tipo Massive Open Online Course (MOOC), para poder ofrecer contenidos en línea, multiplataforma y en diferentes formatos.
El nuevo modelo se corresponde con la evolución general del mercado de la formación global, más orientado a internet y abierto a nuevos formatos y dispositivos. Además, el cambio se hace con vocación pública, asegura Jordi Roca, director de formación de Barcelona Activa, y busca “romper aún más las barreras de acceso a la formación y que la presencialidad no sea un elemento que haga que mucha gente no pueda acceder a esta”.
