La participación ha sido de un 63,94 por ciento y la abstención de un 36,06 por ciento. U 3,12 por ciento más de participación que en las elecciones de 2012.
El PSOE ha ganado las elecciones autonómicas en Andalucía con el 89,57% un 63,94 por ciento de los votos que le dará 47 escaños.
PP-A consigue 33 diputados y el 26,76 por ciento de votos.
Podemos se estrena con 15 escaños y el 14,84 por ciento de los sufragios.
Ciudadanos logra un respaldo del 9,28 por ciento y 9 diputados.
IULV-CA, con un apoyo del 6,89 por ciento de los votantes, se queda en 5 escaños.
La fragmentación del voto se ha producido, y el PSOE de Susana Díaz gana aunque en minoría. El PP ha sufrido un importante desplome de votos. Podemos irrumpe pero los escaños conseguidos le dejan al margen de la representación que esperaban.
IU se queda sin posibilidad de tener una presencia significativa en el Gobierno andaluz y es Ciudadanos quien se posiciona como partido decisivo para asegurar la gobernabilidad. A pesar de ser la cuarta fuerza política, su posibilismo, manifestado en la campaña, y su no negación de los pactos les hacen más apto para llegar a acuerdos.
