El comisario de Inmigración, Dimitris Avramopoulos, visitará por primera vez Ceuta y Melilla el 20 y el 21 de abril para conocer sobre el terreno la presión migratoria que se vive en las dos ciudades autónomas y la respuesta de las autoridades españolas.
«El objetivo es hacer balance de la situación sobre el terreno en Melilla y Ceuta, también a la luz de la legislación recientemente adoptada sobre medidas de control de fronteras», ha explicado la portavoz de Inmigración, Natasha Bertaud.
Avramopoulos viajará primero a Madrid el lunes 20 de abril, donde se reunirá con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy. Después irá a Ceuta y el martes estará en Melilla. Allí visitará los puestos fronterizos, las oficinas de protección internacional y los centros de estancia temporal para inmigrantes.
El Ejecutivo comunitario ya ha pedido al Gobierno español en diversas ocasiones información detallada sobre casos de uso de violencia contra inmigrantes en las vallas fronterizas de las dos ciudades autónomas y está examinado los cambios normativos para regularizar el rechazo en frontera con el fin de determinar si se ajustan a la legislación de la UE.
Aunque admite que el uso de concertinas en las vallas fronterizas no está prohibido por la legislación de la UE, Bruselas ha recomendado a España que use «medidas alternativas» de vigilancia basadas en el análisis de riego, la cooperación y el intercambio de información.
El Ejecutivo comunitario insisten además que «cualquier medida de vigilancia fronteriza debe ser proporcional a los objetivos perseguidos y debe respetar el derecho internacional y el principio de no devolución».