Esta mañana, la Guardia Civil ha entrado en la sede de la constructora FCC en la calle de Balmes para buscar documentos vinculados al ‘caso Innova’ de corrupción sanitaria con epicentro en Reus. El juez que instruye el caso también ha ordenado entradas y registros en la sede de Medioambiente del Ayuntamiento de Reus; en el Consell Esportiu del Baix Camp; la mercantil Giravolt y en la empresa municipal Rellsa.
El ‘caso Innova’ acumula ya más de medio centenar de imputados, entre ellos la ex cúpula de la Sanidad pública catalana y miembros del equipo municipal.
La Guardia Civil ya detuvo en el mes de abril a nueve personas relacionadas con esta operación. El juez considera que existen indicios de los delitos de falsedad documental, prevaricación, malversación, soborno, tráfico de influencias y blanqueo de capitales.
Una de las piezas del ‘caso Innova’ se centra, precisamente, en el sobrecoste por las obras del gigantesco Hospital de Sant Joan de Reus, por las cuales ya está imputado su arquitecto, Jorge Batesteza. La empresa Sagessa también se encuentra en el epicentro de una de las nueve piezas en que se divide el ‘caso Innova’ por el cual ya hay más de 50 imputados después de tres años de investigación. Se trata de una empresa pública dependiente del conglomerado Innova y a la que se investiga por la adjudicación de decenas de contrato a dedo de forma irregular.
Entre la lista de imputados se incluye a Josep Prat y Carles Manté, dos de los últimos responsables del Servicio Catalan de la Salud (CatSalut), el ente que gestiona la sanidad pública catalana, a los que se acusa de malversación y blanqueo de capitales.
