Ayer en el Caserio Zabalaga de Hernani donde está situado el museo Chillida-Leku se vivió la fusión de dos nombres propios con gran marca personal.
El viejo pero remodelado Caserío Zabalaga alberga en sus 13 hectáreas las obras más representativas del gran artista vasco Eduardo Chillida Juantegui, que ayer tuvieron la compañía de otra gran marca, en este caso la de la marca Italiana Maserati, una marca de lujosos vehículos deportivos con un diseño incomparable, que estuvieron a la altura del anfitrión.
En el evento al que asistieron numerosas personalidades de Donostia y que tuvo tanto al hijo como al nieto del artista Luis Chillida y Mikel Chillida como anfitriones, se pudieron ver las últimas novedades y modelos de la marca Italiana. Así mismo los asistentes que lo desearon, pudieron probar los vehículos acompañados de especialistas del motor venidos desde Barcelona exclusivamente para el evento.
Tal y como comenta el Personal Brander Oianko Choperena especialista en Marca Personal que también asistió a la exposición, lo que ayer se vivió fue una mezcla de belleza poder y arte que pocas veces se tiene la oportunidad de admirar, desde la fuerza y tradición del hierro y la cultura vasca, hasta la belleza minimalista más exquisita del diseño Italiano.