La ciudad está terminando el dispositivo para la llegada de los primeros refugiados sirios. La alcaldesa, Ada Colau, ha explicado que Barcelona tiene capacidad para ser una ciudad de acogida y también una ciudad de entrada de refugiados que les ofrezca una primera atención. “Queremos que las personas que lleguen a la ciudad vivan como un vecino más”, ha explicado Colau. El Gobierno quiere dedicar a la acogida 10 millones de euros del superávit del presupuesto municipal del 2015.
La alcaldesa encabezará un dispositivo municipal que visitará diferentes ciudades europeas de acogida. Acompañada de expertos y equipos técnicos, Colau viajará a ciudades que ya reciben a personas refugiadas. En este dispositivo también asistirá el que es desde hoy el nuevo coordinador del Plan Ciudad Refugio de Barcelona, Ignasi Calbó. Experto en legislación internacional de derechos humanos, ha sido hasta ahora el jefe del Área de Acción Humanitaria de la Agencia Catalana de Cooperación.
En cuanto a la dotación económica del dispositivo, Colau ha remarcado que el objetivo del Gobierno es que se dediquen 10 millones de euros procedentes del superávit del presupuesto del 2015, un dinero que se destinaría principalmente a las entidades que trabajan en este ámbito. Por otra parte, se reforzará el Servicio de Atención al Inmigrante, al Emigrante y al Refugiado de Barcelona (SAIER) y también se ampliará la partida de cooperación para colaborar con las entidades dedicadas al asilo en zonas europeas de tránsito de refugiados.
Desde que se habilitó el correo ciutatrefugi@bcn.cat, hace unos 15 días, se han recibido 3.000 mensajes de entidades y ciudadanos barceloneses. La alcaldesa ha agradecido esta muestra de solidaridad de la ciudadanía, aunque ha remarcado que no está previsto que las personas refugiadas que lleguen a Barcelona se alojen en casas particulares, “aunque agradecemos el ofrecimiento de pisos vacíos que nos han hecho llegar algunas familias”, ha explicado Colau.
Para elaborar el plan se quiere tener en cuenta a todos los grupos municipales y, en el próximo Plenario del 2 de octubre, se presentará una moción conjunta para declarar a Barcelona ciudad refugio.
