El Gobierno de Castilla-La Mancha va a crear un total de 1.042 nuevas plazas en el servicio sanitario a partir de 2016, una medida que se suma a otras que ya viene realizando el Ejecutivo regional para reforzar la sanidad pública como el retorno a las 35 horas para los sanitarios, que supondrá la incorporación de 450 trabajadores más, o el Plan de Impulso a los Servicios Públicos que se aprobará antes de que acabe el año.
Un anuncio que ha realizado el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, durante la inauguración del VIII Congreso de Investigación dirigido a profesionales de enfermería y fisioterapia, un evento organizado por el sindicato SATSE que se celebra los días 19 y 20 de noviembre en la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales del campus universitario de Ciudad Real.
García-Page, quien ha reconocido que el momento que atravesamos “no es fácil”, con una merma del 30% de presupuesto respecto a hace seis años, ha reconocido que será difícil volver a los estándares de bienestar del pasado, “pero en sanidad espero que podamos recuperar mucho de lo que se ha ido degradando o perdiendo”. Eso sí, ha aclarado, “no se puede arreglar todo de golpe”, motivo por el cual ha pedido “márgenes de corresponsabilidad del movimiento sindical”, y “mucha ayuda” por parte de los profesionales.
Se va a apostar por crear profesionales y consolidar puestos en Castilla-La Mancha, dotando de “musculatura” al servicio público en la Región “en parte con el dinero que vamos a dejar de gastarnos en la sanidad privada de Madrid” tras el fin del convenio sanitario con la Comunidad vecina, “y en parte con la recuperación del fondo de cohesión sanitario”, a lo que hay que sumar el “esfuerzo global de contención que vamos a exigir a la Administración”, ha garantizado el presidente García-Page.
Por último, el jefe del Ejecutivo autonómico ha hecho un reconocimiento a los médicos y enfermeros, “a todo el sector que ha aguantado mucho la tensión, que lo ha pasado muy mal soportando recortes” en un momento en el que se ha producido “un estrés brutal al sistema”, a pesar de lo cual “ha dado mucho más de lo esperable”.