El incendio declarado este sábado en Igantzi y que se ha extendido al término municipal de Lesaka ha quedado controlado sobre las 11.20 horas de hoy, domingo, tras afectar con diferente grado de incidencia a una superficie de unas 250 hectáreas.
La Presidenta del Gobierno de Navarra, Uxue Barkos, ha visitado el puesto de mando avanzado, instalado en el parque de los bomberos voluntarios de Lesaka, donde ha sido informada de la situación y del desarrollo de los trabajos de extinción, en los que participan en total casi cien personas, incluidos los efectivos de la Unidad Militar de Emergencias, con 40 vehículos, 2 helicópteros y un avión contraincendios. También han estado presentes las consejeras de Presidencia, Función Púbica, Justicia e Interior, María José Beaumont, y de Desarrollo Rural, Medio Ambiente y Administración Local, Isabel Elizalde (quien ya se encontraba en el lugar desde primeras horas de la noche de ayer), así como el director general de Interior, Agustín Gastaminza; el responsable de los bomberos del Gobierno de Navarra, Víctor Rubio, y el director de Protección Civil, Félix Esparza, además del alcalde de Lesaka, José Luis Etxegarai, y de la teniente de alcalde del Ayuntamiento de Igantzi, María Josefa Etxeberria.
La Presidenta Barkos ha felicitado, en nombre del Gobierno de Navarra, a los diferentes cuerpos implicados en la extinción del incendio, “pero muy especialmente la coordinación que han logrado los bomberos y el guarderío forestal de Navarra”. Ha añadido que la “eficacia y la eficiencia demostradas es la muestra evidente de que el trabajo se acomete con seriedad y rigor”, y ha mostrado su satisfacción porque la respuesta ofrecida al grave problema planteado “ha sido de diez”.
Por su parte, la consejera María José Beaumont ha resaltado la coordinación que ha existido entre los efectivos que participan en las labores de extinción del fuego, “que se ha demostrado eficaz frente a los vaticinios de algunos que decían que con la supresión de la Agencia Navarra de Emergencias estaba en riesgo. Ha ocurrido justamente lo contrario, hay una colaboración y un intercambio de información continuo entre todas las fuerzas y cuerpos de seguridad que tienen que intervenir en sucesos de este tipo”.
Isabel Elizalde ha agradecido el trabajo de los bomberos profesionales y voluntarios y ha dicho que se han vivido momentos “muy tensos” porque en la mente de todos estaba el gran incendio ocurrido hace justamente 26 años, el 17 de diciembre de 1989, en esta misma zona y con unas condiciones meteorológicas similares. “La verdad es que la labor que se ha realizado es impresionante, la formación y la profesionalidad de quienes han participado tiene que dar tranquilidad a la sociedad. La coordinación y el respeto que ha habido entre todos ellos ha hecho posible que en estos momentos podamos decir que el incendio ya está realmente controlado”, ha manifestado la consejera.
Caída de un árbol sobre un cable
El incendio se inició sobre las 15.30 horas de ayer, sábado, en una zona de monte arbolado de Igantzi, como consecuencia de la caída de un árbol sobre un tendido eléctrico, y su propagación se ha visto favorecida por el fuerte viento, las elevadas temperaturas y la ausencia de humedad tanto en el suelo como en la vegetación.
Durante la tarde de ayer fueron movilizadas unidades de los parques Central y de Oronoz, así como bomberos voluntarios de Leitza y Lesaka, además de un helicóptero que realizó varias descargas mientras las condiciones de visibilidad lo permitieron. Este dispositivo fue reforzado durante la noche para intentar controlar un frente que había penetrado en el término municipal de Lesaka y que provocó el desalojo preventivo de dos caseríos en el barrio de Frain, donde también acudieron los bomberos para vigilar el avance del fuego e intervenir si fuera necesario para proteger las viviendas. En total fueron movilizados 25 bomberos profesionales de los parques de Oronoz, Central (Cordovilla), Navascués, Burguete, Alsasua y Tafalla.
Medios desplazados
A la vista de la dimensión que estaba adquiriendo el incendio, que llegó hasta la carretera N-121-A obligando a cortarla entre las Ventas de Igantzi y Etxalar, desde el Departamento de Presidencia, Función Púbica, Justicia e Interior se solicitó la colaboración de la Unidad Militar de Emergencias y la intervención de un avión contraincendios del Ministerio de Agricultura y Medio Ambiente, que se han incorporado a primeras horas de esta mañana. La UME ha desplazado el Batallón de Emergencias 4, con base en Zaragoza, integrado por 53 efectivos y 25 vehículos, incluidos 5 autobombas, 2 cisternas y los de transporte de sistemas de transmisiones, logístico y sanitarios.
Los bomberos del Gobierno de Navarra han desplazado 40 efectivos de los parques de Oronoz, Cordovilla, Tafalla, Lodosa, Estella y Peralta, lo que ha permitido la retirada de los bomberos de Burguete, Navascués y Alsasua. En cuanto a los medios materiales, han aportado 2 bombas rurales, 4 bombas forestales, 1 cisterna y 10 vehículos de transporte, además de los 2 helicópteros. A ellos hay que unir 6 técnicos del Guarderío forestal del Gobierno de Navarra.
El dispositivo se irá desmontando progresivamente en la medida de que la situación lo permita, ya que se mantienen tocones y brasas humeantes y va a mantenerse un amplio reten ante la posibilidad de que se reactive algún foco de fuego.
En total, y según una primera estimación provisional, el perímetro alcanzado por el incendio es de 250 hectáreas, viéndose afectadas en diferente grado especies de matorral, masas mixtas atlánticas, repoblaciones de coníferas y roble americano.
La Policía Foral y la Guardia Civil han colaborado en labores de vigilancia y ordenación del tráfico.
