El factor Miedo dentro de la Marca Personal

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¿A quién no se le ha hecho un nudo en el estómago frente a una situación desconocida? ¿Alguna vez nos ha costado dormirnos o nos hemos despertado inquietos por algún acontecimiento que no dominamos y que se ha presentado de improviso en nuestra vida? o ¿hemos temblado ante la toma de una decisión importante que no sabíamos a que nos podía llevar?

Si somos sinceros, todos hemos sentido en algún momento de nuestra vida Miedo.

El miedo es una emoción provocada por nuestra aversión natural al riesgo o la amenaza. Se manifiesta en forma de angustia, de malestar y, para reforzar su acción protectora, es una sensación desagradable que en su versión más intensa nos paraliza y se llama terror.

Yo siempre he tenido miedos, por lo menos desde que tengo consciencia de memoria. Recuerdo un largo pasillo en la casa de mis abuelos que acababa en una enorme habitación fuera de uso y sumida de manera permanente en la oscuridad. Tuve miedo cuando escogí la carrera que debía acompañar mi trayectoria profesional, también lo tuve cuando vi que en mi primer matrimonio no había más alternativa que la ruptura y lo seguí teniendo cuando decidí, junto con otros socios, comprar una empresa y así en bastantes más ocasiones. El común denominador en estas situaciones era que se abría una puerta hacia algo desconocido fuere un espacio oscuro o un futuro incierto por estar fuera de mi control.

Al otro lado del miedo se mueve una recompensa, un beneficio que obtendremos si somos capaces de superar la situación y actuar, que puede ir desde un beneficio material a sentirse mejor y ser más feliz. Al final del negro pasillo había primero caramelos o una propina y después la felicidad por la superación de un desafío, tras la ruptura había la esperanza de un reencuentro conmigo mismo de una vida más plena y equilibrada. Y en el ámbito empresarial y profesional detrás de cada miedo hay un paso adelante medido en forma de experiencia o de resultados.

El Miedo es también un compañero de nuestra Marca Personal, la huella que dejamos está llena de miedos de todos los colores porque nuestras acciones no son neutras y siempre tienen riesgos.

El miedo también me ha paralizado, no el pánico que implica una pérdida de control de la situación, si no el terror hueco que sin que te des cuenta te mantiene en tu zona de confort y te desactiva para evitar que te enfrentes con algo o con alguien o contigo mismo. Cuando el miedo te aleja del conflicto sin más alternativa se convierte en paralizante y te pone a disposición de los demás y de las circunstancia. Aceptar el conflicto como algo natural refuerza la Marca Personal mientras que jugar a la avestruz la congela o la erosiona pero nunca la potencia.

Para vencer el miedo hemos de tener consciencia de que existe porque muchas veces se esconde bajo la forma de malestar o desidia y lo primero que necesitamos es identificarlo.

Conocer, reconocer y gestionar nuestras emociones y también las de los demás es el primer paso para poner un nombre a cada una de ellas y poderlas reconocer. Esto significa que es importante tener nuestra inteligencia emocional en plena forma porque de lo contrario corremos el riesgo de ahogarlas y entrar en una situación involuntaria de autoengaño. Tener consciencia y capacidad de manejar nuestras emociones nos servirá para poner cada pieza de nuestro puzle en el lugar que le corresponde, la empatía y la asertividad nos ayudarán a ponernos en la piel de nuestros interlocutores y a mantener cuando sea necesario nuestro punto de vista de manera eficaz y sin renunciar a nada importante permitiendo que cuando sea necesario el conflicto fluya y el miedo se aleje.

Tener definidos nuestro foco y nuestros valores nos allanará el camino porque nos ayudará a poner cada cosa en el lugar y a distinguir lo importante de lo superfluo y lo tolerable de lo que no lo es para poder decidir sin temor y no quedarnos encerrados en la falta comodidad de la inacción.

Profundizar en nuestro autoconocimiento es la manera más útil de reconocer cuando el miedo nos acecha para convertirlo en nuestro aliado y en un valor para nuestra marca personal.

Si quieres vencer tus miedos cuenta conmigo.

Por Jordi Collell. PersonalBrandingQueMarca.