La Guardia Civil, fruto de la cooperación con el Reino Unido y con la coordinación de EUROPOL, ha desarrollado la operación “TOR ESPAÑA” que ha culminado con la detención de 8 personas en España por intercambiar pornografía infantil a través de la red TOR. Los archivos se encontraban ubicados en una página de la DeepWeb donde sus miembros compartían archivos y links de contenido pedófilo.
Las imágenes encontradas han sido clasificadas como de “extrema dureza” (actividad sexual con penetración, con animales o sadismo).
La operación ha culminado con el registro de 8 domicilios en las provincias de Madrid, Valencia, Murcia y Gijón y con la identificación plena de 8 usuarios de pornografía infantil que posteriormente fueron detenidos/investigados por supuesto delito de corrupción de menores, ya que desde los domicilios registrados habrían realizado las conexiones a estos lugares de la red con contenido pedófilo. Además se han intervenido 8 ordenadores, 20 discos duros externos y varios soportes ópticos.
Red TOR “The Onion Router”
Se trata de una investigación muy compleja debido al uso, por parte de los autores, de la red TOR, un programa y una red que cifran y anonimizan las comunicaciones.
TOR son las siglas en inglés de “The Onion Router”, llamado así por la forma como funciona, en “capas” de cifrado. Esto significa que el navegador no nos lleva directamente al sitio web deseado, sino que nos hace pasar por diversas máquinas intermedias dentro de la propia red.
Así, cada máquina cifra la comunicación y nos da una dirección IP diferente. Ésto es vital para alcanzar el anonimato, pues la dirección IP es la que nos hace geolocalizables.
TOR es el medio más usado en entornos en los que los comunicantes están especialmente motivados en proteger su identidad y el contenido de sus comunicaciones, como en el caso de la pedofilia.
En la misma red TOR es donde están los nodos que anonimizan las comunicaciones, además de ser el sitio para alojar páginas web, chats y foros que, conforma una comunidad a nivel mundial en la que prima la protección de la identidad de los usuarios. De esta forma, se hace imposible conocer quién está detrás de cada conexión a la web oscura, por lo que se convierte en el espacio perfecto para las actividades de los pedófilos y pederastas, así como para todo tipo de ilícitos penales.
Las Unidades de Delitos Telemáticos especializadas en la lucha contra la pedofilia, realizan rastreos en este tipo de redes para detectar la actividad de posibles usuarios dedicados a la producción e intercambio de material pedófilo.
La investigación continúa abierta y se está analizando minuciosamente el material intervenido para determinar la posible existencia de un delito de producción de material pedófilo (abusos sexuales a menores de edad) y determinar la identidad de las víctimas así como las posibles conexiones que se pudieran establecer con otros usuarios.