Escolares santanderinos plantan árboles en sus colegios por el Día de los Bosques

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La conmemoración, que se celebra cada 21 de marzo, lleva este año como lema “Los bosques y el agua”

Escolares de varios colegios de Santander han plantado hoy ejemplares de varias especies autóctonas en sus centros para conmemorar el Día Internacional de los Bosques y rendir así un homenaje a los árboles y la función que desempeñan.

El concejal de Medio Ambiente, José Ignacio Quirós, se ha sumado también a esta jornada con la que se pretende “resaltar el papel de los árboles para la conservación de la biodiversidad y sensibilizar a los más pequeños sobre la protección y preservación de los bosques”.

El Ayuntamiento de Santander se ha adherido a esta jornada mundial en defensa de los bosques con una actividad denominada “Codo a codo con los árboles”, que ha consistido en la plantación de árboles autóctonos en las instalaciones de varios colegios.

Así, la iniciativa se ha desarrollado a lo largo del día de hoy en los centros Elena Quiroga, Haypo, Dionisio García Barredo y José Arce Bodega, donde los alumnos, ayudados por monitores, han plantado un fresno, un madroño, una encina y un abedul, respectivamente.

Las plantaciones, que se acompañan de la lectura de un poema, continuarán mañana en otros colegios, como el Jesús Cancio, Padre Apolinar, Centro Social Bellavista (Julio Blanco), Santa María Micaela, Fuente de la Salud y Sardinero.

Los centros han podido elegir entre diversas especies autóctonas para plantar en el recinto escolar, tanto de hoja perenne (acebos, madroños, laureles, encinas), como de hoja caduca (como saúco, abedul, roble, cornejo, fresno, salguera negra, espino blanco y alisos).

Los escolares serán a partir de ahora protagonistas también de su cuidado y los verán crecer en sus respectivos centros, lo que contribuirá a reforzar su compromiso con el medio ambiente y con la preservación de los bosques, ha afirmado Quirós.

Con esta actividad Santander secunda un año más la celebración del Día Forestal Mundial, una recomendación del Congreso Forestal Mundial que se celebró en Roma en 1969, y que fue aceptada por la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) en 1971.

La jornada se celebra cada 21 de marzo, coincidiendo con la fecha de entrada de la primavera en el hemisferio Boreal y con la llegada del otoño al hemisferio Austral.

En este 2016 el lema elegido para la conmemoración ha sido “Los bosques y el agua”, para concienciar a la sociedad sobre el papel fundamental que desempeñan los bosques para abastecer al planeta de agua dulce, un recurso que es esencial para la vida.