La Policía Municipal se personó en la madrugada del domingo en una fiesta ilegal que se celebraba en el distrito de Fuencarral en Madrid, donde habían retenido contra su voluntad a más de 70 jóvenes, muchos de ellos menores de edad.
El organizador de la fiesta cerró los accesos del edifico para evitar que continuara entrando público, de forma que impidió la salida de las personas que ya estaban dentro.
Durante casi una hora decenas de jóvenes quedaron atrapados en la planta del edificio donde se celebraba la fiesta y comenzaron a pedir auxilio.
Alertados los padres de algunos de ellos, se personaron en el lugar para pedir que dejaran salir a sus hijos pero el organizador se negó. Se dio aviso a la policía y los bomberos, que tuvieron que entrar a la fuerza para rescatar a los jóvenes. El Samur tuvo que atender a varios de ellos que presentaban cuadros de ansiedad.
La fiesta no estaba autorizada ni contaba con medidas de seguridad. El encargado será investigado por un delito de detención ilegal, además de ser denunciado por desobediencia a los agentes e infracciones administrativas por fiesta ilegal.