Este tránsito sólo puede verse unas 13 veces cada siglo, pero el último (que se registró el 6 de noviembre de 2006) no pudo observarse desde nuestro país.
El tránsito de Mercurio comenzará a la una de la tarde, aunque no penetrará en el disco solar (se verá una especie de “gota negra”) hasta pasado un cuarto de hora. Y tardará en completarse siete horas.
Varios Observatorios, como el IAC (Instituto de Astrofísica de Canarias) y Sociedades españolas de Astronomía han organizado observaciones en la calle en la que, de forma gratuita, podrán participar los ciudadanos.
Según los astrónomos, este tránsito es “excepcional”, porque los tránsitos por delante del Sol de los planetas interiores del sistema solar (Venus y Mercurio) son escasos, sobre todo, los de Venus, porque apenas hay un par de ellos cada cien años. Además, para los científicos sirven para calibrar los grandes Telescopios Solares y para estudiar la “atmósfera” de Mercurio, “que es muy tenue”, como explica a la Cadena SER Alfred Rosenberg, del IAC.
Como ocurre también con los eclipses, los expertos aconsejan no mirar directamente al sol, porque puede provocar daños graves en los ojos. Además, el tamaño de Mercurio es tan “pequeño” que este tránsito no puede verse a simple vista.
Es necesario el uso de telescopios, pero éstos deberán incorporar filtros especiales para evitar problemas. De todas formas, sino quiere arriesgarse, lo mejor es seguir la retransmisión en directo y a través de Internet que realizarán varios centros europeos, entre ellos, el IAC, que dispone del mayor telescopio solar de Europa.