Los científicos del Instituto Tecnológico de Massachusetts, han desarrollado una especie de tirita que elimina la flacidez y suaviza las arrugas sin que se note. Así hablando en un idioma que entendamos todos, te pones la piel artificial encima e tuya, y esconde tus arrugas, las bolsas de los ojos e incluso impide el deterioro de tu propia epidermis si está sometida a la radiaciones ultravioleta.
Se trata de XPL, una segunda piel que se fabrica con un polímero de silicona que imita las características de una piel joven y saludable. Tiene la capacidad de cambiar a una segunda piel.
En el estudio crearon una biblioteca de más de 100 candidatos a polímeros ‘reparadores’ de la piel. Todos destacaban por una estructura química conocida como siloxano, una cadena de átomos de silicio y oxígeno alternantes. Son un tipo de resinas de silicona, no tóxicas que pueden ser implantadas en el organismo humano sin ser rechazadas.
«Estos polímeros pueden ser ensamblados en una disposición de red conocida como una capa de polímero reticulado (XPL)». De todos ellos, escogieron el que mejor imitaba la elasticidad y flexibilidad de una piel sana.
“El desarrollo de una segunda piel que es invisible, cómoda y eficaz al retener agua y otros materiales supone numerosas aplicaciones, que aún no somos capaces de pensar. Estamos emocionados con las oportunidades que se nos presentan”, asegura Robert Langer, profesor del MIT y uno de los autores de esta investigación.
El resultado final se manifiesta a los dos minutos, dura 24 horas y, todo esto, sin pasar por el quirófano.