Realizar un curso de idiomas en otro país es uno de los planes de verano más demandados. Según la Asociación Española de Promotores de Cursos de Idiomas en el Extranjero (ASEPROCE), un 94% de los interesados en cursos de idiomas en el extranjero opta por destinos de habla inglesa
El conocimiento de un segundo idioma llega a ser un aspecto diferenciador a la hora de conseguir un empleo. Ocho de cada diez ofertas de trabajo para perfiles medios y directivos exigen conocimiento de inglés, según la empresa de recursos humanos Randstad. Por eso, no es de extrañar que cada vez más personas se animen a viajar a otro país en verano para realizar un curso de idiomas.
Las ofertas son abundantes. La mayoría de los interesados, concretamente un 94%, se ha decantado este año por destinos donde el inglés es el idioma oficial, seguido de países donde se habla francés y alemán como primer idioma. No obstante, cada vez más empresas ofertan destinos tan variados como Australia, Japón, Sudáfrica o Rusia, entre otros.
Durante los últimos años ha aumentado la demanda de campamentos de convivencia con nativos o programas de voluntariado. Los más jóvenes optan por campamentos de idiomas compaginados con actividades deportivas o por ampliar el curso de idiomas al año completo para disfrutar de un año académico en el extranjero.
Prepararse en el extranjero para superar con éxito exámenes de idiomas oficiales es otra de las tendencias al alza, que ha animado a muchos usuarios a viajar a otro país para realizar un curso específico con este fin.
Existen muchas otras modalidades de cursos, también dirigidos a ejecutivos y grandes directivos que buscan la consolidación de un segundo idioma realizando cursos muy concretos focalizados en el inglés de negocios.
Lenfex es una de las múltiples empresas que oferta cursos de idiomas en el extranjero y que ha sabido adaptarse a las necesidades de los usuarios. Lenfex nace en 2003 para suplir la demanda en centros públicos y concertados en los que no existía una alternativa a los tradicionales viajes de fin de curso de los alumnos donde se combinase el carácter educativo de sus programas de Miniestancias Escolares con el ocio de un viaje de estudios y la experiencia de salir al extranjero conviviendo con una familia nativa.
A día de hoy, esta empresa cuenta con una amplia experiencia en el desarrollo programas de inmersión lingüística, consolidándose como una compañía de referencia en la enseñanza de idiomas en el extranjero.
Uno de sus puntos fuertes son los programas que ofrecen, adaptados a perfiles de usuarios muy dispares. Ofertan cursos de idiomas con prácticas laborales, programas de inmersión lingüística en el extranjero o programas en familia en más de 14 países
Realizar un curso de idiomas es una inversión a largo plazo. Desde ASERPROCE aseguran que la formación en el extranjero es “muy rentable por las ventajas futuras que aporta en la búsqueda de empleo” y animan a los usuarios a realizar un curso de idiomas en otro país siempre que tengan la oportunidad.