Amparo Marco se ha reunido con representantes del grupo de enfermería en salud escolar del CECOVA.
La alcaldesa de Castellón, Amparo Marco, junto al concejal de Educación, Enric Porcar, y la concejala de Salud Pública, Mary Carmen Ribera, se han reunido con representantes del Grupo de Trabajo de Enfermería en Salud Escolar (ENSE) del Consejo de Enfermería de la Comunidad Valenciana (CECOVA), para solicitar la colaboración de esta entidad de cara a la puesta en marcha de la figura de la enfermera escolar en nuestra ciudad.
Amparo Marco ha explicado a las representantes de ENSE que la intención del consistorio es poner en marcha este proyecto durante el próximo curso 2016-2017, para ello han solicitado a los responsables de enfermería que presenten una propuesta económica y de gestión de este servicio «con el objetivo de ver en cuántos colegios se podría poner una enfermera escolar y qué coste tendría». En este sentido, la alcaldesa ha recordado que en la ciudad de Castellón hay 37 centros de primaria por lo que el proyecto se implantaría por fases,»el ayuntamiento realizará un estudio riguroso para conocer la situación de los alumnos y alumnas de cada colegio y poder priorizar los centros que más precisen de este servicio».
Marco ha afirmado que «sabemos que las competencias en Sanidad no nos corresponden, pero como administración más cercana a los ciudadanos tenemos la obligación de velar por su bienestar y el servicio de enfermería escolar es una apuesta clara por la salud. Estos profesionales pueden atender numerosas situaciones que se dan en el día a día de los centros educativos como atender alergias, a niños celiacos, diabéticos, etcétera, por lo que consideramos incuestionable la necesidad de contar con la presencia de profesionales de enfermería en el ámbito educativo».
Para finalizar, la alcaldesa ha destacado que «además de centrar su labor en la atención sanitaria, la enfermera juega un papel clave en el aspecto docente de los centros educativos ya que que junto con el equipo de profesores trabaja para normalizar la vida diaria del niño con necesidades educativas especiales y enfermedades crónicas, fomentando hábitos de vida saludables en toda la población escolar y comunidad educativa».