Cuando elegimos un neumático hay que saber que existen diferentes tipos. Unos funcionan mejor con temperaturas y condiciones invernales y otros, por el contrario, con calor son más eficaces. De esta forma, siempre hay que informarse previamente para no llevarnos sobresaltos en la conducción
Muchos conductores no conocen que cada estación meteorológica tiene un neumático preciso para que las prestaciones del vehículo sean las mejores posibles sobre el asfalto. La seguridad en la conducción depende de los conductores, pero el vehículo también debe estar lo mejor preparado posible y sus neumáticos son uno de los elementos más determinantes para no sufrir problemas.
Nos recuerdan desde https://www.giga-neumaticos.es/ que en algunos países europeos obligan circular con neumáticos invernales por los problemas que pueden acarrear el hielo y la nieve. Nos comentan que en cada período existe un neumático característico aunque, verdad es, que existen los que son perfectos durante todos los momentos meteorológicos.
De esta forma, por ejemplo, según la Organización de Consumidores y Usuarios, con la carretera seca, la distancia para pasar de 100 a 0 km/hora cambia según la temperatura y el tipo de goma que llevemos en nuestro vehículo.
De esta forma, en invierno, los neumáticos necesitan 51 metros para frenar y 38 metros los de verano. Por su parte, serían 49 metros los neumáticos que sirven para todo el año. En verano, por su parte, 56 metros son los que necesitan para el frenado los neumáticos de invierno; 38 metros los de verano y 52 los neumáticos que sirven para todo el año.
En el caso de que la carretera se encuentre mojada y pasando de una velocidad media de 80 km/hora a 0 también hay diferencias interesantes a destacar. En período invernal, se necesitan 40 metros con los neumáticos de invierno; 43 metros con los neumáticos de verano y 44 metros con los que valen para todo el año. En verano, por su parte, serían 45 metros con los de invierno, 40 con los de verano y 47 con los otros.
Con lluvia o agua en la carretera, la cuestión cambia. Los neumáticos invernales son más eficaces que los de verano, aunque sólo si la temperatura es relativamente baja.
Como conclusión, hay que destacar que cuando el invierno aprieta y la nieve aparece resultan más palpables las diferencias. Si un vehículo circula a 40 km/h y se quiere frenar, el de invierno tardará 29 metros y los de verano -61 metros. Con los neumáticos para todo el año necesitaremos 42 metros.
De esta forma, estas diferencias servirán para elegir un neumático u otro pero siempre con datos y con consejos de los buenos profesionales.
