El asesino de Jo Cox, Thomas Mair, es un hombre de 52 años que sufre problemas mentales y que ha sido relacionado con grupos de extrema derecha.
Jo Cox, diputada laborista, era asesinada ayer a la salida de una biblioteca en Birstall, por Thomas Mair, un hombre con una personalidad controvertida que hace sospechar que actuó por odio; un crimen político ideado por una mente perturbada.
Mair, conocido como ‘Tommy’, trabajaba como jardinero y había estado en tratamiento por ser obsesivo-compulsivo. Aunque nunca había tenido problemas en el vecindario en el que reside, se sabe también que se encontraba abonado a una revista llamada ‘Springbool Club’, ligada a los supremacistas surafricanos.
Testigos de al agresión aseguran que Mair gritó ‘Britain First’, el eslogan de la extrema derecha contraria a la permanencia de Reino Unido en la Unión Europea.