El Ayuntamiento de Ibros, en Jaén, ha declarado tres días de luto a oficial desde el pasado sábado, para mostrar sus condolencias por la muerte del niño de cuatro años que fue atacado por un perro en la finca de su abuelo.
La familia paterna del menor es natural de Ibros y su pueblo, le está rindiendo homenaje en un sentido luto que culminará hoy a las 12,00 horas.
El niño fue incinerado este sábado en el tanatorio Ciudad de Jaén.
El perro causante de la agresión, registrada en una finca de la zona residencial de Pago de Pozuela, propiedad de su abuelo, no pertenecía a la familia. Se están investigando aún las circunstancias que rodean al desgraciado suceso.
El perro tenía una raza cruzada, y no se sabe porqué se hallaba en la parcela. Este lunes está previsto que un veterinario vaya a verlo en el depósito en el que se encuentra para catalogar la peligrosidad del mismo, así como pedir la documentación necesaria al dueño del animal.
El suceso se originó este viernes por la tarde, entre las 19,00 y las 19,30 horas, cuando un perro mordió fieramente al niño, dejándolo gravemente herido, El pequeño moría en la madrugada del sábado en el Hospital Materno-Infantil de Jaén.
