Seis morlacos de la ganadería de José Cebada Gago, de Medina Sidonia, han sido protagonistas hoy del encierro pamplonica, que ha resultado largo, caótico y peligroso.
El segundo encierro de las fiestas ha resultado un batiburrillo de imágenes y circunstancias difíciles de apreciar. La manada se ha separado enseguida y algunos toros han quedado aislados y despistados, un astado caía durante el recorrido, otro se daba la vuelta y corría en dirección contraria y un tercero quedaba parado en Estafeta.
Los pastores y corredores más expertos han conseguido dirigir a la manada hasta la plaza tras unos larguísimos 5 minutos de carrera.
Se han creado momentos de verdadera angustia, con el resultado de al menos 5 heridos por asta.
Ha sido en Mercaderes cuando la manada se ha separado por completo y así han llegado hasta la calle Estafeta, donde esto ha corrido por separado el encierro generando numerosos momentos de peligro. Los toros estaba muy desconcertados, uno de ellos ha embestido incluso a otro astado después de correr casi 300 metros en dirección contraria.
Los astados gaditanos son viejos conocidos en la capital navarra y regresaban a la plaza pamplonesa tras tres años de ausencia.
Los toros de Cebada Gago son los que más corneados han dejado en sus participaciones, 46 en total. Su último encierro, en 2012, dejó tres heridos en una carrera de 3’37». Sus astados son los que más corneados han dejado en Santo Domingo, Estafeta y el Callejón.
