Parece un milagro, no?. Sin dietas, sin ejercicio, sentado en la oficina, en el jardín o frente al televisor, incluso mientras te metes entre pecho y espalda un bocata de bacon.
Tu te sientas y solo por eso, ya adelgazas, dicen que sobre dos kilos por mes.
Se llama Sprang Chair, cuesta alrededor de unos 315 euros y su diseño está preparado para que no sea estática sino que genere cierto movimiento que la pueda hacer inestable a medida y gusto de quien la usa.
Compuesta por una bola sujetada por una serie de cuerdas elásticas, su inestabilidad obliga al usuario a estar constante movimiento ejercitando apenas sin darse cuenta los abdominales.
Sus creadores han pensado también en hacerla muy cómoda, ergonómica y como valor añadido generar la posición idónea para la espalda.
Lo que decimos, un milagro que podemos ver cómo funciona en este video.