El palista español logró el oro en el K1 1000 metros de piragüismo tras realizar una remontada extraordinaria en los últimos metros y adjudica a España la sexta presea de los Juegos de Río.
“Ha sido la carrera de mi vida. Esperaba luchar por las medallas pero no ganar”
En sus primeros Juegos Olímpicos, el palista nacido en Oxford hace 21 años marcó un tiempo de 3:31.447, imponiéndose al checho Josef Dostal y al ruso Roman Anoshkin. Walz ya había sido campeón del mundo sub 23 en el K4 1000 metros y había logrado ser tercero y segundo en los mundiales de Moscú y Milán, respectivamente. Pero, sin duda, nada puede hacer sombra a este trabajado oro conseguido en Río.
“No me lo esperaba, fue una sorpresa. Esperaba luchar por las medallas pero no ganar y menos aún con tanta diferencia. Es una pasada, estoy en una nube. Ha sido la carrera de mi vida. Estoy alucinado”, dijo el mallorquín afincado en Madrid.