Tres camisetas, tres pantalones, dos calzoncillos, dos pares de calcetines, dos de zapatos, una bolsa de plástico con 4.000 dólares en billetes de dos, un ordenador portátil y un iPad.
Esto es lo que obtendrán los herederos de James Altucher, cuando muera. No sabemos si les gustará mucho la idea, ya que antes de esta decisión de vivir con lo justo, llegó a ser millonario.
Este exempresario de la tecnología, capitalista de riesgo y experto financiero, se reinventó a sí mismo como gurú de la autoayuda hace 5 años, predicando la supervivencia en una época en que el sueño americano se ha convertido en una farsa.
Hace varios meses el gurú de la autoayuda echó a la basura o donó por internet todo lo que poseía y dejó su apartamento en Nueva York. Desde entonces, duerme en las casas de sus amigos o en apartamentos alquilados a través de Airbnb.
Fue millonario en dos ocasiones y las dos veces se arruinó. Según la página oficial del escritor, ahora Altucher trata de basar su vida en los principios del minimalismo.
«Para mí, tener poco significa que no tengo que pensar en las cosas que poseo», afirma Altucher. «Ahora puedo pensar en otras cosas. Puedo explorar otras maneras de vivir más fácilmente». Asegura que «el amor, la felicidad, la curiosidad y la amistad son las verdaderas emociones minimalistas porque no es algo que recibes de otros, sino que das».