El científico ruso Igor Ashurbeyli hizo público el pasado 12 de octubre el proyecto de creación de un nuevo país llamado Asgardia, que se ubicará en el espacio.
Será, según su fundador, un espacio «desmilitarizado» para el desarrollo científico, asegurará el uso pacífico del espacio y protegerá la Tierra de amenazas espaciales como tormentas solares, cometas y el riesgo de infecciones causados por microorganismos de cuerpos celestes.
La idea es que cualquier ciudadano del planeta Tierra pueda obtener la nacionalidad asgardiana sin tener que salir ni perder la ciudadanía del país en que reside.
Asgardia también tiene ya un sitio web que ha recibido las solicitudes de ciudadanía de 407.000 personas. Entre los tres primeros países donde residen los ‘asgarnianos’ se encuentran China, EE.UU. y Turquía.
Sin embargo, para que la ciudadanía del nuevo país tenga valor legal, la ONU debe conceder al proyecto el estatus de país soberano, cuestión que hoy ocupa al fundador de Asgardia. De ser aceptados por la ONU, en 2017 se pondrá en órbita un satélite, que representará el territorio del Estado-nación.
El nuevo Estado tendrá todos los atributos necesarios: «Gobierno y embajadas, bandera, himno nacional e insignias», asegura Ashurbeyli.
Además, el padre de la nueva nación interestelar ha propuesto lanzar el primer satélite con los asgardianos entre 2017 y 2018. Su idea es proporcionar total libertad al desarrollo tanto científico como tecnológico bajo su jurisdicción. «Asgardia es una especie de matrioska hecha de filosofía, derecho y tecnología. Cualquier cosa que se halle oculta en su interior la descubriremos en el futuro cercano».