Desde el pasado otoño la Guardia Civil trata de interceptar 42 monos tití con los que traficaba una red española dedicada al mercado negro de animales exóticos. Tras conseguir recuperar 25, se ha descubierto, tras un exhaustivo análisis, que uno de los monos tiene el virus VIH. Esto se traduce en un gran peligro tanto para los ciudadanos, como para los propietarios clandestinos de alguno de estos ejemplares.
La operación “Titisali”, dio comienzo el pasado octubre, con el fin de capturar los 67 monos con los que traficaba la red ilegal, según cuenta DMAX. Pudieron salvar a 20, otros cinco murieron, y fueron llevados al centro de rescate AAP Primadomus de Villena y al Arca de Noé, ambos centros localizados en Alicante.
La organización delictiva criaba los monos en domicilios particulares relacionados con tiendas de animales, las cuales vendían posteriormente a los primates de forma ilegal. Por el momento siete personas han sido investigadas, repartidas entre Alicante, Murcia, y Sevilla.
