El piloto creyó que estaba bombardeando un asentamiento de Boko Haram. Han muerto 52 personas hasta el momento y 120 han resultado heridas
Médicos sin Fronteras ha dado parte del bombardeó por parte de la fuerza aérea nigeriana de un campamento de desplazados de Rann, de momento han muerto 52 muertos y 120 heridos, algunos de ellos están en estado grave. Otras fuentes pertenecientes al ejército apuntan a que los muertos ascienden a más de 100.
Entre las víctimas, se encuentran niños, desplazados y trabajadores humanitarios.
Al parecer todo ha sido un error, el piloto que dirigía el avión con las bombas creyó que estaba atacando un asentamiento de Boko Haram, según ha comunicado el presidente de Nigeria, Muhammadu Buhari, que ha expresado su consternación y ha pedido mantener la calma.
«Este ataque de gran escala sobre personas vulnerables, que han huido de violencia extrema es espantoso e inaceptable», dijo Jean-Clement Cabrol, director de operaciones de MSF. «La seguridad de los ciudadanos ha de ser respetada. Hacemos un llamado urgente a todos los involucrados para asegurar la facilitación de evacuaciones médicas, vía aérea o terrestre, para los sobrevivientes que necesitan asistencia médica», agregó.