Una investigación financiada por el Gobierno busca «moléculas de utilidad para los seres humanos en antitumorales o antibióticos», bajo aguas de la Antártida.
En los bentos antárticos, erizos, algas, esponjas o corales forman un mundo de organismos fundamentales en la cadena alimenticia. Científicos españoles están buscando allí moleculas que puedan tener aplicaciones medicinales. En estos seres vivos pueden estar los antibióticos del futuro. «Estas moléculas pueden tener una potencial utilidad para los seres humanos como antitumorales o antibióticos».
Este proyecto está financiado por el ministerio de Economía y que se han completado con éxito en la trigésima campaña antártica española. «El ministerio financia la operación de los barcos y la apertura de las bases con uno de los siete millones de euros aproximadamente y la agencia ha financiado 13 de los siete proyectos», cuenta Marina Villega, directora de la Agencia Estatal de Investigación.