Una mujer de 42 años ha muerto electrocutada en la bañera de su casa, en Moscú, cuando su teléfono móvil con el que intentaba hacerse un selfie se le escapó de las manos y cayó al agua, estando éste conectado a la red eléctrica.
El cuerpo fue encontrado por su hijo, que rompió la puerta del baño cuando su madre llevaba varias horas sin dar señales de vida. Según Mash, el joven encontró a su madre postrada en la bañera, con el teléfono sobre su pecho y conectado a la red eléctrica.
Esta muerte es al menos la tercera que se produce en Moscú en idénticas circunstancias. A mediados de febrero un joven de 17 años se electrocutó en la bañera cuando se le escapó de las manos una tableta conectada a la red eléctrica. A comienzos de este mes, una niña de 12 años de Moscú perdió la vida en la bañera cuando se le cayó al agua el teléfono, también enchufado a la corriente.