El plan piloto Habitat Gipuzkoa, que ofrece pisos provisionales para personas sin hogar, habilitará dos nuevas viviendas en la provincia, que se sumarán a las cinco ya existentes en Donostia.
La iniciativa la lleva a cabo la Diputación de Gipuzkoa, junto con la Fundación Rais Euskadi y el Ayuntamiento de San Sebastián. El diputado general de Gipuzkoa, Markel Olano, la diputada de Políticas Sociales, Maite Peña, y la directora de Rais Euskadi, Alejandra Puente, visitaron una de las viviendas del programa.
Olano ha informado de que el objetivo de esta iniciativa, que parte con un plazo de cuatro años y una inversión de la Diputación de 30.000 euros, es llegar a disponer de 10 hogares en el territorio guipuzcoano.
El propósito es utilizar «como base una vivienda, para que un grupo de personas en situación de exclusión residencial, a través de una labor de acompañamiento clave, encuentre un espacio de oportunidades para recuperar su relación con el entorno y pueda construir una red de apoyo que le permita salir de su situación de exclusión», ha indicado.
Los participantes de este proyecto, con una edad media de 49 años los hombres y 41 las mujeres, carecen de apoyos familiares, con una media de cuatro años viviendo en la calle o en alojamientos de emergencia y que presentan problemas de salud, alcoholismo o adicción al cannabis.