El presunto autor del incendio provocado en un inmueble abandonado en Donostia el pasado mes de marzo y que provocó la muerte de una persona fue detenido el pasado jueves en Bergara y ya ha ingresado en la prisión de Martutene por orden judicial.
El suceso se remonta a la madrugada del pasado uno de marzo sobre las 5:30 horas en la calle Zubiberri Bidea en Donostia, donde se produjo un incendio de grandes dimensiones en un edificio abandonado, utilizado como refugio por personas sin recursos y que resultó totalmente calcinado. El siniestro fue atendido por Bomberos y servicios sanitarios junto a Policía Local y Ertzaintza.
En el momento del siniestro se encontraban tres varones durmiendo en su interior, dos de los cuales se vieron afectados con heridas y quemaduras de diversa consideración siendo evacuadas al Hospital de Donostia. Por su parte, un tercer varón que dormía en la zona más alta del inmueble quedó atrapado por las llamas y su cuerpo calcinado fue localizado por el equipo que trabajó en la extinción.
Ante este hallazgo se desplazaron al lugar un equipo forense, agentes de la Policía Científica de la Ertzaintza, así como miembros del Servicio de Investigación Criminal Territorial de la Ertzaintza en Gipuzkoa, quienes se hicieron cargo de la investigación.
Desde un primer momento de la investigación, los indicios apuntaban a una acción provocada, centrándose la misma sobre un varón, de 49 años, vecino de Bergara, que un tiempo atrás habría residido en dicho edificio junto con su entonces pareja sentimental, sobre la que tenía orden judicial de alejamiento. Precisamente, la investigación apunta a la venganza contra la expareja como móvil del delito.
Durante las últimas semanas la Ertzaintza logró reconstruir de manera minuciosa los movimientos del sospechoso por diferentes puntos de la capital donostiarra desde su llegada a primera hora de la mañana del día 28 de febrero a la dársena de la Estación de Autobuses hasta el momento en que abandonó la ciudad a bordo de un tren, minutos después del inicio del incendio.
También se determinó cómo se había hecho con el combustible usado para iniciar el fuego. En concreto, se sirvió de una tercera persona, que desconocía sus intenciones, y a que le entregó un bidón de cinco litros de capacidad y diez euros con el encargo de comprar el combustible en un surtidor de la ciudad.
Por su parte, los informes químicos practicados por la Policía Científica de la Ertzaintza revelaron la existencia de acelerantes, gasolina concretamente, en diferentes evidencias recogidas en la inspección ocular practicada en el lugar del hecho.
En la mañana del jueves, 4 de abril, los agentes del SICTG procedieron a la detención del sospechoso en la localidad de Bergara, cuando se disponía a abandonar su domicilio.
Posteriormente fue traslado a las dependencias de la Ertzain-etxea de Deba-Urola, con el fin de realizar las pertinentes diligencias, quedando en custodia. Al detenido se le imputaron la presunta comisión de los delitos de incendio, asesinato y lesiones.
El pasado viernes el detenido fue puesto a disposición del Juzgado de Instrucción nº 3 de Donostia, instructor de la causa, donde se decretó su ingreso en la prisión del centro penitenciario de Martutene.