Una mujer de 28 años fue arrestada el miércoles en Errenteria, tras ser sorprendida por los agentes intentando robar en un domicilio.
Los hechos ocurrieron sobre las once y cuarto de la noche, cuando una patrulla detectó la presencia de un varón y una mujer manipulando la cerradura de una vivienda ubicada en un bajo. Al aproximarse para interesarse por lo ocurrido ella se mostró muy nerviosa y señaló que vivía en esa casa en régimen de alquiler, alegando haber perdido las llaves por lo que había tenido que llamar a un cerrajero para poder entrar. El varón acreditó que efectivamente era un profesional cuyos servicio habían sido requeridos, habiendo llegado ya a cambiar el bombín de la puerta.
Al detectar una actitud sospechosa y numerosas incongruencias en lo señalado por la joven, una vez abierta la puerta la casa le fue solicitado el contrato de arrendamiento no pudiendo facilitar documentación alguna que acreditara que residía en la misma. Al mismo tiempo se pudo contactar con el ciudadano que constaba como titular de la vivienda, comunicando éste que se encontraba de viaje y que residía solo en la casa no habiendo alquilado la misma a nadie.
Ante esta situación y tras realizar las necesarias comprobaciones se procedió a la detención de la sospechosa como presunta autora de un delito de robo con fuerza.